
Al Grupo Parlamentario Popular en el Congreso le da mala espina la cena entre la portavoz del Gobierno, Pilar Alegría, y su excompañero Francisco Salazar, cesado este verano de sus cargos en la Moncloa y Ferraz por denuncias de acoso sexual de varias mujeres … socialistas. Tras publicar este martes ‘Artículo 14’ imágenes de ambos en un céntrico restaurante madrileño, los populares han movido ficha con el registro de una batería de preguntas en la Cámara Baja, a la que ha tenido acceso ABC.
En el Comité Federal del PSOE celebrado el 5 de julio, en el que se renovó la cúpula del partido tras el ingreso en prisión de Santos Cerdán, el ex número tres, por su implicación en el caso Koldo, Salazar tenía enteros para ascender en el organigrama socialista. «A Paco Salazar lo conozco desde hace muchos años, ha sido y es un compañero íntegro», dijo en verano Alegría a su llegada al cónclave. Pero las denuncias internas por supuestos casos de acoso sexual a compañeras frustraron su posible nuevo cargo y Salazar terminó el día defenestrado, sin ser secretario general de Coordinación Territorial en Presidencia del Gobierno ni secretario de Acción Electoral y Análisis de la Ejecutiva Federal del PSOE.
«Es un paso necesario», zanjó Alegría ese 5 de julio, cuando abandonaba la reunión. Un giro de 180 grados en apenas unas horas. Ahora, se les ha visto cenando a solas en Madrid y en el PP la imagen ha generado suspicacias. En una batería de preguntas al Gobierno, los populares disparan: «¿Está funcionando acaso como un asesor en la sombra?», «¿ha sido el cese de Francisco Salazar una pantomima de cara a la galería?». La portavoz del Ejecutivo, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros de este martes, ha asegurado que se trataba únicamente de «un encuentro personal» con alguien a quien conoce hace años y con quien no hablaba «desde hace medio año».
Fuentes del Gobierno remarcan que la portavoz ya fue muy contundente en su día al salir del Comité Federal tras el que fue cesado Salazar y apuntan que escuchar a alguien no es avalar su comportamiento. También subrayan que hasta la fecha no ha llegado ninguna denuncia contra él a la Moncloa, informa Ainhoa Martínez. Un argumento, este último, que recuerda a las propias palabras de Alegría en la rueda de prensa de otro Consejo de Ministros, el del pasado 8 de julio, en la que aseveró que no había trascendido denuncia alguna contra él ni en el Palacio de la Moncloa ni en Ferraz. «No podemos darnos cuenta de las cosas que no conocemos», sentenció entonces la también ministra de Educación, Formación Profesional y Deportes.
Salazar, tras su salida de la política, montó una empresa llamada Servicios e Ideas Estrategias Electorales y Sociales SL. En su iniciativa, el Grupo Parlamentario Popular pregunta si el Gobierno mantiene o está negociando algún contrato con dicha consultora, sita en Madrid. Pero los populares también quieren saber los motivos que llevan a la ministra portavoz a reunirse con una persona acusada de acoso sexual; si esa «reunión amigable» con Salazar constituye «una actitud respetuosa» con las víctimas; si acaso Alegría mantiene la consideración de su excompañero como alguien «íntegro», como dijo ella «durante la primera mitad del pasado día 5 de julio»; si era una fase del expediente abierto en Ferraz contra Salazar; y si le trasladó algún detalle sobre la tramitación de las denuncias contra su comportamiento.
