Aunque con fluctuaciones, el empleo doméstico ha crecido y alcanzado un máximo de 260,620 personas en el 2019. Actualmente, más de un 90 % permanece en la informalidad.
El gobierno intentó regularizar este oficio en el 2022, para disminuir esa informalidad, mediante una resolución del Ministerio de Trabajo, que luego fue declarada inconstitucional. Sin embargo, aún dicha cartera no concretiza las acciones que seguirá para lograr este cometido al que se comprometió mediante convenios internacionales.
De acuerdo con los principales indicadores, el empleo en servicios hogareños y áreas afines ocupa el 5 % de la población económicamente activa, siendo la principal fuente de ingresos para uno de los sectores más vulnerables de la economía, liderado por mujeres con baja escolaridad.
Al desagregar los datos, al primer trimestre de 2024, la cantidad de personas que se dedicaban a realizar quehaceres domésticos, de jardinería, de choferes y cuidado de niños, entre otros, se ubicó en 248,514, de una masa laboral total de 4,941,183.
A pesar de los esfuerzos del gobierno por fomentar la formalidad en el trabajo doméstico, a marzo de este año, solo 15,473 personas dedicadas a estos oficios estaban incluidas en el Sistema Dominicano de Seguridad Social (SDSS), disfrutando de seguro médico, ahorros para su pensión y, entre otros beneficios, protección ante riesgos laborales. Mientras tanto, el 93.77 % restante trabajaba en la informalidad.
«Es demandante»
Rosanni Pineda es una joven madre que se dedica al cuidado de dos niños y a la limpieza en una casa de familia en la ciudad. Realiza esta labor porque no culminó sus estudios y necesita dinero para mantener a sus dos hijos de seis y cuatro años.
«Quisiera trabajar en otra cosa, pero no sé hacer más nada. No terminé la escuela por cosas de la vida y tengo que mantener a mis hijos», expresó a Diario Libre.
Al explicar su relación laboral con sus empleadores, dice: «Es un trabajo demandante, pero yo tengo mi horario y mis asignaciones. Cumplo con eso y si ellos (los padres de los niños) llegan temprano, me voy».
La familia que contrata los servicios de Pineda es una pareja en la que el padre es un trabajador independiente y la madre es la única con empleo formal, por lo que sus recursos no les permiten pagar más de los 12,000 pesos al mes a su ayudante del hogar.
Sin embargo, su responsabilidad los ha llevado a ayudar a Pineda a que termine sus estudios y a colaborar con sus gastos médicos cuando es necesario, aunque la joven madre y sus hijos se encuentran incluidos en el régimen subsidiado del Seguro Nacional de Salud (Senasa).
La Encuesta Nacional de Fuerza de Trabajo (ENFT) del Banco Central arrojó que la informalidad creció un 2.29 % al tercer trimestre de este año respecto al mismo período de 2023.
El MT aún no se pronuncia
Todavía se espera conocer los próximos pasos que tomará el Ministerio de Trabajo luego de detener, hace casi un año, todos los procesos para regular el trabajo doméstico a raíz de la sentencia dictada en junio de 2023 por el Tribunal Constitucional (TC), que declaró inconstitucional la Resolución 14-2022 emitida por dicho ministerio para formalizar este oficio.
Hace casi un año que el ministerio indicó a Diario Libre que buscaría una alternativa para lograr su meta de formalizar este renglón laboral y que los trabajadores domésticos puedan disfrutar de los derechos adquiridos de los empleados del sector formal.
Este periódico volvió a contactar a la institución para conocer cómo avanzan los estudios sobre el tema, pero no ha recibido respuesta hasta fecha.
El presidente Luis Abinader aseguró a la prensa en junio del 2023 que buscaría la vía legal para ejecutar el proceso de formalización, respetando la decisión del TC, con el fin de elevar la calidad de vida de los trabajadores del hogar y áreas afines.
Lo único que queda del fallido proceso de regulación es la Guía de Formalización del Trabajo Doméstico, un documento de 16 páginas que explica todo lo relacionado con la regulación que el Gobierno intentó implementar hace dos años. Hasta ayer está publicada en la página web del MT.
Actualmente, el salario promedio para los trabajadores domésticos es difícil de calcular pues cada contratante acuerda un pago en función de sus ingresos económicos y de las actividades que realizará el empleado doméstico. Sin embargo, algunas páginas especializadas en la canalización de ofertas de trabajo para este nicho publican salarios mensuales que van desde 14,000 hasta 24,000 pesos dependiendo del tipo de servicio y las condiciones de quienes pagan por tener un ayudante del hogar. En algunos casos, las ofertas duplican la propuesta del ministerio, que buscaba fijar un salario mínimo de 10,000 pesos al mes por una jornada completa de ocho horas de trabajo. Actualmente, el salario mínimo del sector privado no sectorizado se encuentra en 25,116 pesos en las grandes empresas; 23,023 para las medianas; 15,428 en las pequeñas y 14,232 pesos en las microempresas. Este último renglón representa el 85.9 % del tejido empresarial a nivel nacional.
