Más de dos décadas han transcurrido desde el estreno en TVE de la primera edición de ‘Operación Triunfo’, un formato que se convertiría en todo un fenómeno sociológico. Fue un 22 de octubre cuando aterrizara el concurso en la pequeña pantalla y 16 jóvenes soñando con ser cantantes empezaran a convivir en la Academia más famosa de la tele. Uno de ellos era David Bustamante, quien justo 23 años después de su salto a la fama gracias al ‘talent show’ presentó su nuevo álbum en ‘El Hormiguero‘, en una noche en la que también se confirmó la visita de Belén Esteban la semana próxima.
El artista cántabro cerró la semana en el espacio de Antena 3, donde compartió los detalles de ‘Inédito’. Aunque no sin antes recibir «un honor que tiene muy poca gente». Él ya iba predispuesto a su regalo, con una flecha dibujada en el brazo señalando la muñeca, por si a Motos se le pasaba entregarle el regalo destinado a los llamados invitados ‘Infinity’, aquellos que se han sentado con él veinte veces o más. Solo Miguel Ángel Revilla, Luis Tosar, Santiago Segura y Mario Casas y Arturo Valls gozan del privilegio del selecto club.
Además de una silla mucho más mullida, una taza dorada y una tarjeta del mismo color, los invitados ‘Infinity’ cobran su fidelidad en especias. En concreto, en el regalo de un reloj personalizado valorado en más de 3.000 euros. «Que no se te olvide. El tiempo es oro, luego ya hablamos de lo que quieras. Dame lo mío, luego ya iremos viendo…», exigió Bustamante en tono jocoso dirigiéndose al presentador.
Además, Motos le obsequió con la tarjeta Infinity, que según él, «con esto te quitan hasta las multas». «Te convalida todo», afirmó el de Requena.
David Bustamante presenta el proyecto de su vida
Eufórico tras recibir sus regalos de parte de ‘El Hormiguero’ y ante el inminente lanzamiento del disco, el cantante explicó que se trata «del proyecto más importante de mi carrera, de mi vida». «Llevo trabajando muchísimos años para que llegue este momento, porque es un disco plenamente compuesto por mí. Son mis canciones, es una mirada hacia dentro. Es entonar el ‘mea culpa’, soltar lastre, vivir el amor… Lo que es la vida en sí. La gente se sentirá muy identificada porque al final soy un humano viviendo, equivocándose, aprendiendo y saliendo adelante. Como todos», compartió.
Adelantó en este mismo sentido que «hay canciones muy comprometidas: contra el ‘bullying’; otra que es como un ‘hate’ a los ‘haters’, personas que hacen a través de las redes tantísimo daño; hay canciones de soltar lastre, etc. Al final es un aprendizaje».
«Yo empecé muy joven, con 19 años, y me ha tocado vivir de todos los colores», reflexionó. El pionero de la ‘deconstrucción masculina’, como lo denominó el presentador, llegó a afirmar en la charla con Motos que le gustaría quedarse en el momento en el que está ahora mismo. Por una razón: «seguir haciendo canciones para toda la gente que me ha demostrado que continúan esperándolas después de 23 años con las mismas ganas o más». En el momento presente de su vida y de su carrera, de hecho, considera que «estoy en un viajazo».