Córdoba se perfila como el epicentro de los grupos organizados dedicados al robo de cobre en la Península desde donde llevaban a cabo labores de robo, receptación, tratamiento -pelado de los cables- y venta al resto del territorio nacional. Sólo en operaciones de la Guardia Civil en el último año y hasta la fecha se detuvieron a 47 personas por el robo de cobre en la provincia y se esclareció el robo de más de 50 toneladas de este metal que pone en jaque sectores estratégicos como son las Telecomunicaciones y el Transporte como el sabotaje de este pasado domingo a las vías de Alta Velocidad.
A estos detenidos por parte del Instituto Armado se le suman otros 14 arrestados en diferentes operaciones de desarticulación de grupos especializados en el robo de cable por parte de la Policía Nacional en Córdoba este año incautándose de más de 28 toneladas de cobre en dos operaciones sólo entre febrero y abril de este año.
En el último de estos golpes contra el robo de cobre, con una investigación de la Policía Nacional que culminó con diez detenidos permitió esclarecer el robo de 18.254 kilos de cobre procedente principalmente del cableado de una empresa privada de telefonía cuyo valor en el mercado conllevaría unas pérdidas de 800.000 euros aproximadamente. Se trataba, según la Policía, de «una de las mayores recuperaciones de cobre robado».
El material lo almacenaban en una nave situada en un polígono de Córdoba y desde ahí lo distribuían por todo el territorio nacional en camiones que alquilaban para su transporte, vendiéndolo en chatarrerías que operaban de manera fraudulenta. Se pudo comprobar que la mayoría de los viajes que realizaban para distribuir el cobre, tenían como destino negocios situados en Badajoz y Bilbao.
Tras las investigaciones realizadas, los agentes de la Policía Nacional comprobaron que «los integrantes de la organización, de diversos orígenes, tenían una estructura interna muy bien definida con una división del trabajo muy clara entre sus miembros».
Estos robos, además de afectar gravemente al servicio telefónico, ocasionaron daños a terceros y alarma social en las poblaciones afectadas, al quedar incomunicados sus habitantes hasta la recuperación del servicio.
Junto a esta operación de la Policía Nacional están las del Instituto Armado que le han precedido, al menos, cinco en el último año. Una de las más importantes se desarrolló hace ahora un año, en mayo de 2023, con la detención de 13 personas acusadas por seis delito de robo y pertenencia a organización criminal con la aprehensión de 10 toneladas. En septiembre pasado los agentes detuvieron a dos individuos por robar chimeneas de cobre de una empresa en Montilla.
En el mes de octubre, la Benemérita desarticulaba en Córdoba el mayor grupo criminal compuesto por 18 integrantes por robar más de 20 kilómetros de cable telefónico de cobre. Estaban asentados en varias localidades cordobesas y operaban en varias provincias quemando al aire libre el cable. A mediados de noviembre pasado la Guardia Civil desarticulaba otra organización integrada por siete personas que llegó a sustraer 10.850 metros de cable aéreo de cobre de telefonía en la provincia de Valladolid.
Una furgoneta de cobre: 50.000 euros
El valor de este cobre supera los 50.000 euros por cada 10.000 kilos -carga media de una furgoneta- en el mercado negro donde su precio casi se ha duplicado en el último año, según han señalado fuentes policiales a ABC.
Los siete últimos detenidos por la Guardia Civil el pasado mes de febrero fueron interceptados en la A-4 dentro del término municipal de Córdoba y, de nuevo, la localidad de Montoro, que emerge como el epicentro del trabajo de estos ladrones de cable que operan en provincias de toda España. Los ‘golpes’ de estos especialistas en robo de cobre se han producido en varias provincias desde Jaén a Badajoz, Valladolid, Madrid, Sevilla o Zamora entre otros puntos.
Cometían los hechos principalmente por la noche, «tomando grandes medidas de seguridad para no ser descubiertos». Utilizaban herramientas de gran calidad para dejar el cobre sin envolturas y así adquirir una mayor valoración al realizar su venta en el mercado.
Un camión de cobre junto a la Ciudad Deportiva
Una de estas operaciones a la que se ha hecho referencia del pasado mes de febrero fue especialmente llamativa ya que los agentes de la Policía Nacional localizaron en la capital cordobesa un camión que se encontraba cargado con 10.600 kilogramos de cable de cobre pelado, preparado a la espera de recibir instrucciones para ser transportado.
Los hechos tuvieron lugar en torno a las 22.00 horas del 11 de febrero, en la zona del Camino Carbonell, cerca de la Ciudad Deportiva del Córdoba CF, cuando agentes de este Cuerpo de Seguridad del Estado fueron comisionados para que acudieran a dicho lugar, donde al parecer se estaba cargando una gran cantidad de cobre en un camión.
Los policías acudieron rápidamente y una vez allí, localizaron un camión de grandes dimensiones, con las luces apagadas. A la llegada de los indicativos policiales, los allí presentes se dieron a la fuga, quedando en el lugar solamente el propietario del vehículo. Este último manifestó haber sido contratado por un tercero para trasladar el camión cargado de cobre para su pesaje y, una vez pesado, transportarlo al lugar que el mismo le indicaría.