Al menos tres personas han muerto y más de 20 han resultado heridas a causa de un «ataque a gran escala» lanzado por el Ejército de Rusia contra la capital de Ucrania, Kiev, según han confirmado las autoridades del país, en medio de la invasión desatada en febrero de 2022 por orden del presidente ruso, Vladímir Putin, informa la agencia Europa Press.
La Fiscalía ucraniana ha indicado en un comunicado que los tres muertos son trabajadores de los equipos de rescate, antes de cifrar en 22 el número de heridos y confirmar daños en varios edificios residenciales de la ciudad, motivo por el que ha abierto una investigación por presuntos crímenes de guerra.
Poco después, el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, ha afirmado que «Rusia no cambia su forma de actuar» y ha denunciado que el «ataque masivo» contra Kiev y otras ciudades del país, en el que han sido lanzados «más de 400 drones y 40 misiles», ha dejado tres muertos y 49 heridos.
«Lamentablemente, el número (de víctimas) podría aumentar», ha lamentado, antes de destacar que «algunos de los misiles y drones lanzados por Rusia fueron derribados» por los sistemas de defensa aérea. «Doy las gracias a nuestros guerreros por su defensa. Por desgracia, no todos fueron interceptados», ha dicho.
«Rusia debe rendir cuentas por esto. Han estado golpeando ciudades y aldeas desde el primer ministro de la guerra para destruir la vida. Hemos hecho mucho juntos con el mundo para permitir a Ucrania defenderse, pero es momento de que Estados Unidos, Europa y el resto del mundo puedan parar esta guerra presionando a Rusia», ha argumentado.
En este sentido, ha sostenido a través de un mensaje publicado en su cuenta en la red social X que «si alguien no está presionando y está dando a la guerra más tiempo para que siga costando vida, supone complicidad y debe haber rendición de cuentas». «Debemos actuar de forma decisiva», ha zanjado.
Tras ello, el ministro del Interior de Ucrania, Igor Klimenko, ha especificado en su cuenta en Telegram que entre las víctimas hay tres miembros de los equipos de rescate, antes de agregar que el ataque ha tenido como objetivo «infraestructura civil y crítica».
Por su parte, el ministro de Exteriores ucraniano, Andri Sibiga, ha denunciado que «Rusia ‘respondió’ esta noche por sus aviones destruidos a través de ataques contra civiles en Ucrania». «Kiev, Lutsk, Leópolis, Ternópil, Chernígov, Kremenchuk y otros sitios. Edificios de múltiples plantas alcanzados. Infraestructura energética dañada. Hay muertos y heridos en todo el país», ha lamentado.
«La diferencia entre Ucrania y Rusia deriva de que Ucrania ataca objetivos militares legítimos, como aeronaves equipadas para bombardear a nuestros niños. Rusia ataca zonas residenciales, civiles e infraestructuras críticas», ha argumentado a través de un mensaje en su cuenta en la red social X.
«Es inaceptable poner al mismo nivel a Ucrania y a Rusia. Rusia es el agresor y Ucrania se defiende. Ucrania golpea en defensa propia, mientras que lo de Rusia son actos de agresión y terrorismo», ha esgrimido, antes de indicar que este ataque «demuestra de nuevo que la presión internacional sobre Moscú debe aumentar lo antes posible».
En esta línea, el jefe de la diplomacia ucraniana ha hecho hincapié en que «el único argumento de Rusia es el terror». «Nuestra respuesta deben ser sanciones firmes que puedan aumentar el coste de la guerra para el agresor y nuevas decisiones para reforzar las defensas de Ucrania».
A las víctimas en Kiev se suman al menos 15 heridos en Volin y diez heridos en Ternópil, según las autoridades locales, sin que Moscú se haya pronunciado por ahora sobre los supuestos objetivos de estos ataques contra el país europeo.
Rusia afirma haber destruido 174 drones
Las autoridades de Rusia han anunciado este viernes la destrucción de cerca de 175 drones lanzados por el Ejército de Ucrania contra diferentes puntos del país, incluida la capital, Moscú, así como contra la península de Crimea, anexionada en 2014, una medida no reconocida por la comunidad internacional.
El Ministerio de Defensa ruso ha señalado en su cuenta en Telegram que «los sistemas de defensa aérea han interceptado y destruido 174 aparatos aéreos no tripulados ucranianos» durante la noche del jueves y la madrugada del viernes.
Así, ha especificado que los derribos han tenido lugar en las regiones de Moscú, Bélgorod, Briansk, Kaluga, Kursk, Oriol, Riazán, Rostov, Saratov, Tambov, Tula, Vorónezh, además de la provincia de Crimea, sin dar detalles sobre cuántos han sido interceptados en cada lugar.
«Además, tres misiles guiados tipo ‘Neptuno-MD han sido destruidos por los sistemas de defensa aérea activos sobre el mar Rojo», ha recalcado, sin dar informaciones sobre posibles víctimas o daños materiales a causa de estos ataques por parte de Ucrania.