Las personas jóvenes en España han tenido que retrasar sus procesos de emancipación debido a los bajos salarios y al precio del alquiler. Una tendencia que se ha manifestado en los últimos años, pero que empezó a dibujarse hace dos décadas. Según el Informe Juventud en España, elaborado por el Instituto de la Juventud (Injuve) cada cuatro años, una gran proporción de jóvenes se ve forzada a continuar viviendo con sus familiares, sin tan siquiera la posibilidad de compartir piso, lo que provoca que la edad de emancipación en España se sitúe en los 30,4 años. La titular de Juventud e Infancia, Sira Rego, ha presentado este jueves los datos en la sede ministerial.
Otra «gran transformación» del sector de población más joven en España que señala el informe es que un 24 % de las personas jóvenes residentes ha nacido en el extranjero. Esto significa que uno de cada cuatro jóvenes que viven en España son extranjeros. «Se concentra especialmente en la franja de edad de 25 a 34 años y tiene una gran diversidad de orígenes, destacando entre ellos Sudamérica, África y la Unión Europea«, explican desde Injuve. »Un buen dato que demuestra la diversidad de la población española«, ha celebrado la ministra Rego en su intervención. En relación con la población total residente en España, el 17 % es de origen extranjero.
El informe de Injuve también advierte de que la tardía emancipación es una de las causas principales de la baja natalidad. Los datos recogidos en el documento muestran que el 72 % de las personas jóvenes de entre 15 y 34 años quieren tener algún hijo o hija, siendo una realidad únicamente para el 19 % de quienes tienen entre 30 y 34 años. De hecho, señalan que el 87,2 % de las personas de entre 18 y 34 años creen que el bajo nivel de natalidad se debe, «principalmente», a la falta de medios económicos de su generación.
«En estas condiciones, la paternidad/maternidad, con sus condiciones necesarias de estabilidad, no es una opción para la mayor parte de la juventud», señala el Instituto de la Juventud, que lamenta que el dato de fecundidad y maternidad sitúa a España en las últimas posiciones tanto a nivel europeo, como mundial. Injuve recupera los porcentajes de Eurostat de 2022 para exponer esta situación: la edad media de la primera maternidad en España se sitúa casi en los 32 años, en concreto, en los 31,6 años. Mientras que en Francia es del 29,1 y en Alemania, del 29,9. El informe también añade que la tasa de fecundidad está muy por debajo del nivel de reemplazo: 1,16 hijos por mujer en 2022 en España.
Hay más datos en el documento que explican este fenómeno. Injuve advierte también de una población envejecida y cada vez más dependiente. Desde que en 1983 empezó a realizarse esta radiografía, España ha perdido 1,3 millones de jóvenes. Con la lupa: en 2023, España contaba con 7.639.268 jóvenes de entre 15 y 29 años, esto es, un 15,89 %. Pero en comparación con la tasa de hace 40 años, cuando la juventud era del 24,33 %, España ha experimentado una reducción de 8 puntos porcentuales de sus jóvenes.
Cada vez más dependientes y envejecidos
Estos datos provocan que la población sin capacidad de independizarse se sume a la población dependiente de mayor edad. En los últimos 40 años, la pirámide demográfica española se ha invertido: menos jóvenes y cada vez más mayores de 65 años. Según Injuve, el resultado de este fenómeno es «una carga económica creciente para unas generaciones actuales y futuras en edad laboral, con cada vez menor peso demográfico».
