Aunque este año mayo ha regalado a España dos benditas semanas de tregua al calor intenso, el mes termina con temperaturas de pleno verano en buena parte de la Península, especialmente en el centro y sur, donde este miércoles y el jueves, los dos peores días de este episodio cálido, se superarán los 34° de forma generalizada. “En el valle del Guadalquivir es posible que incluso se alcance la cota de los 40° por primera vez este año”, subraya Rubén del Campo, portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet). A pesar de que las últimas primaveras han sido todavía más tórridas, estas temperaturas no son propias de estas fechas, sino que están entre 5° y 10° por encima de los valores habituales. La buena noticia es que, a partir del viernes, se producirá un descenso que llevará a la normalización de los termómetros, pero aún hará calor en el centro y el sur.
¿Es excepcional llegar a 40° en mayo? “Es inusual, aunque no del todo extraordinario”, contextualiza Del Campo. Una consulta hecha por este diario al Banco de Datos Climatológicos de Aemet revela que esa cota se ha alcanzado en la red oficial un total de 64 veces en 11 provincias, ocho de ellas en Las Palmas y, el resto, en Valencia, Alicante, Castellón, Almería, Jaén, Córdoba, Sevilla, Murcia, Badajoz y Ciudad Real. Carcaixent, en Valencia, tiene el récord de la temperatura más alta de mayo en España, con 44,4° en 2015.
En realidad, el grueso de las cifras se agrupa en tres episodios cálidos sufridos en mayo de 2006, de 2015 y de 2022 y hay un dato puntual en 2010 y otro en 2012, por lo que, de marcarse ahora, sería tan solo el sexto año que ocurre desde que hay registros. “Este tipo de episodios de temperaturas extremas fuera de temporada son más probables por el cambio climático”, recuerda el portavoz de la agencia, para quien “lo destacable es que hasta 2006 no hay registros de 40° o más en mayo”.
🧵¿Llegarán los primeros 40 ºC de 2024 en mayo?
Podrían alcanzarse en puntos aislados del valle del Guadalquivir el viernes, día 31. Por ejemplo, en Córdoba.
El primer año en llegarse a 40 ºC en mayo fue 2006. Desde entonces, se ha llegado también en 2010, 2012, 2015 y 2022. pic.twitter.com/12piHjYD34
— AEMET (@AEMET_Esp) May 29, 2024
Para Del Campo, no cabe ninguna duda de que “el hecho de que aparezcan a partir de ese año obedece al calentamiento global y al alargamiento de los veranos”, aunque matiza que “también es probable que ahora sea más fácil alcanzar esa cifra porque hay más estaciones disponibles”. De todas formas, concluye, “en el listado hay estaciones con series largas ―es decir, con mucha memoria histórica―, como Córdoba, Lanzarote, Valencia y Sevilla”.
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La previsión, día a día
De momento, el pasado fin de semana se llegó a 37,5° en Montoro (Córdoba), el lunes esta misma localidad, que hasta 2021 ostentó el cetro de la temperatura máxima jamás alcanzada en España, volvió a superar los 37° y el martes se alcanzaron los 36° en otros puntos del Guadalquivir como Andújar (Jaén) y Córdoba capital y unas 170 estaciones de la red de Aemet, una décima parte, marcaron más de 30°.
Y, para este miércoles, más calor. El día “ha comenzado con madrugadas cálidas en puntos del sur y del área mediterránea, donde no se ha bajado de 20°”, las llamadas noches tropicales y se producirá una subida de las temperaturas diurnas en casi todo el país. Así, se superarán los 32° en el noreste y puntos de la meseta Norte. En el centro y en el sur hará más de 34° y a entre 36° a 38° se llegará en el Guadalquivir. Es posible que caiga alguna tormenta aislada en puntos del Pirineo catalán, mientras que no lloverá en el resto del país.
El jueves “un frente rozará el norte peninsular y, tras él, habrá una entrada de vientos del norte, lo que provocará una bajada de las temperaturas en las comunidades cantábricas, Pirineos y buena parte de la cuenca del Ebro”. En las comunidades cantábricas “a duras penas se llegará a 20°”. Además, el frente dejará chubascos en el extremo norte y en el norte de Cataluña, sin descartar que pueda caer algún chaparrón aislado en puntos de montaña del interior de la Península.
Sin embargo, el calor aún apretará más en el centro, sur y Baleares. “Amaneceremos con noches tropicales en el centro, sur y la costa mediterránea y, por el día, se superarán los 34° en el interior de Cataluña y, de nuevo, en el centro y sur de forma generalizada, con más de 36° en Extremadura, sur de Castilla-La Mancha y Andalucía. En el valle del Guadalquivir y en puntos del interior de la provincia de Huelva se rondarán los 38° o 40°”, completa el pronóstico Del Campo. Habrá aviso amarillo, el más bajo de una escala de tres, por calor en Sevilla, Córdoba y Jaén.
El viernes, avanza el experto, “bajarán las temperaturas en buena parte del norte y del este de la Península y en Baleares”. El descenso en algunas zonas “podrá ser notable, de hasta 6° u 8° menos, pero, como partíamos de un ambiente muy caluroso, tampoco es que vaya a ser frío, sino un ambiente más suave y más propio de finales de mayo”. En el interior de las comunidades cantábricas “sí que será un día fresco, no se llegará a 20°”, y, en el resto de la mitad norte y en el tercio oriental, se superarán los 25°.
Pero en la sartén del suroeste peninsular “no variarán demasiado las temperaturas, es más, podría haber incluso un ligero repunte en el Guadalquivir”. En Extremadura, oeste de Castilla-La Mancha y buena parte de Andalucía se despertarán por encima de los 20° y por la tarde se superarán de nuevo los 34° e incluso 38°/40° en el Guadalquivir. “En puntos aislados de este valle, especialmente de la provincia de Córdoba y quizá también de la de Jaén es posible que se alcance por primera vez este año la cifra de los 40°, algo que tampoco se puede que suceda puntualmente en localidades del valle del Guadiana de la provincia de Huelva”, anota Del Campo. De nuevo, aviso amarillo por calor en Sevilla, Córdoba y Jaén.
Podría haber chubascos en el extremo norte, puntos de Cataluña y de Baleares y algún chaparrón vespertino en zonas de montaña del interior y ojo porque también podría haber tormentas secas, en las que apenas hay agua, pero sí aparato eléctrico y fuertes rachas de viento.
El fin de semana “seguirán bajando las temperaturas, aunque de forma ligera en la mitad sur, en cambio, subirán, también ligeramente, en el norte y en el área mediterránea”, lo que se traduce en de 20° a 22° en las comunidades cantábricas; 30° o más en buena parte del noreste, centro y sur; y 34° o más en los valles del Tajo, Guadiana y Guadalquivir. Habrá chubascos en el Cantábrico oriental y Pirineos y dispersos en entornos montañosos del este y sur de la Península, con posibilidad de nuevo de tormentas secas. En el resto, cielos poco nubosos. La próxima semana, el calor repuntará.
Mientras tanto, en Canarias soplarán los vientos alisios de forma moderada y no se descarta que pueda entrar algo de polvo en suspensión. Las temperaturas subirán, con mínimas de entre 19° y 21° y máximas de entre 26° y 28° en zonas costeras.