El presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, y la rectora de la Universidad de Alicante (UA), Amparo Navarro, han mantenido este lunes su primer cara a cara después de que la Generalitat se retirara de la demanda interpuesta por la Universidad Miguel Hernández de Elche (UMH) contra la implantación del grado de Medicina en el campus alicantino. Tras dos horas y media de reunión, que ha tenido lugar en la sede del Consell en Alicante, la Casa de las Brujas, ambos han defendido que el encuentro, del que no han trascendido los términos, ha sido “muy positivo”.
El conflicto estalló el pasado mes de agosto, cuando la Generalitat anunció a Navarro que se había allanado de la demanda interpuesta por la UMH contra la implantación del grado de medicina en el campus de San Vicente. Esta resolución, que en la práctica da la razón al demandante, dejaba así la continuidad de la titulación, en la que ya hay matriculados 172 alumnos repartidos entre los dos primeros cursos, pendiente de la sentencia de los magistrados del Tribunal Superior de Justicia (TSJ). El litigio continúa porque la UA se personó como parte directamente afectada y no se ha retirado de la demanda.
El rector de la UMH, Juan José Ruiz, indica que su entidad llevó a la UA a los tribunales tras hallar “graves irregularidades” en la documentación presentada por el anterior equipo de gobierno del campus alicantino, a cuya cabeza estaba Manuel Palomar, ante la Generalitat del Botànic que lideraba Ximo Puig y que validó la vuelta de Medicina a la UA en 2022, 25 años de que esta titulación fuera segregada en 1996 y constituyera el germen de la UMH un año después, por iniciativa del entonces jefe del Consell, Eduardo Zaplana.
En un principio, la Abogacía de la Generalitat aprobó la implantación del grado de Medicina en la UA. Sin embargo, con la llegada del PP de Mazón, el departamento jurídico del Consell cambió de opinión y decidió retirarse de la demanda a partir de los mismos argumentos que utiliza la UMH en el tribunal. Sostienen ambas partes que la UA no tiene concertadas las prácticas necesarias para sus alumnos, carece de profesorado cualificado y tampoco cuenta con el presupuesto necesario para implementar la titulación al completo. Desde la UA señalan que con 26 centros sanitarios de la provincia, diez de ellos públicos, no habrá problema para encontrar hueco para las prácticas. También aducen que su profesorado procede del resto de disciplinas de Ciencias de la Salud que imparte y que la única infraestructura de la que carecían, el aula de Anatomía, la han sufragado con una subvención concedida por el Estado de 1,5 millones de euros por, precisamente, aumentar en un 15% el número de alumnos de Medicina previstos inicialmente en su memoria.
Antes de entrar a la reunión, la rectora de la UA ha declarado sentirse “optimista” y “convencida de que, por el bien de todos, resolveremos esta situación, que no ha sido agradable”. Ha sostenido que acude “a escuchar” lo que Mazón le quiera decir y que está “abierta” a cualquier propuesta. “No hay ningún planteamiento inamovible”, ha subrayado.
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