En los próximos días, las familias catalanas empezarán a recibir en sus domicilios el vale escolar de 60 euros destinado a la compra de material escolar. El Govern ha anunciado que este miércoles empezará la distribución de los cheques a los 790.000 beneficiarios. Se trata del segundo año de existencia de los vales, que este año, como novedad, ya no es de 100 euros, sino de 60, tal y como avanzó este diario en abril. La Generalitat decidió reducir la ayuda, a cambio de ampliarla también a los alumnos de ESO (el curso pasado solo se pudieron beneficiar los de primaria), tanto de escuelas públicas como concertadas, así como alumnos de escuelas de educación especial y de la FP básica.
Otra de las novedades de esta edición es que se abre la posibilidad para que las familias cedan uno o dos vales a los centros educativos, a cambio de reducir la cuota en concepto de material escolar. Se da respuesta así a una de las reivindicaciones de las asociaciones de familias, que el año pasado criticaron duramente el vale por el hecho de que no servía para el objetivo que fue creado –reducir el impacto de la inflación en la economía doméstica-, ya que las familias se veían obligadas igualmente a pagar estas cuotas de material.
El vale puede ser usado en uno de los 1.850 establecimiento que se han adherido a la campaña. Sirve para adquirir material escolar, pero también libros de texto y licencias digitales, juegos educativos o pequeños instrumentos musicales. En cambio, quedan excluidos la ropa y los aparatos electrónicos como ordenadores o tablets. Como en la edición pasada, antes de utilizarlo será necesario activarlo por internet a través del portal del vale escolar.
La pasada campaña se saldó con un total de 451.533 alumnos beneficiados (el 95% de los que tenían derecho), que validaron casi 850.000 vales, lo que supuso un importe de 42,5 millones. El principal beneficiario fue Abacus, que concentró un 28% de los cheques (la cadena copa un 30% del mercado), pero todo el gremio -tanto establecimientos pequeños y grandes- se ha mostrado muy satisfecho de la iniciativa. De hecho, otro de los objetivos de la campaña era dar aire al sector de las librerías, muy castigado por la pandemia y por el auge del comercio electrónico.
La Generalitat invertirá un total de 50 millones en la actual campaña. De hecho, la idea inicial era aumentar la partida a 55 millones, lo que hubiera permitido que el importe del vale fuera de 70 euros, pero la falta de Presupuestos de la Generalitat obligó a reducir su valor.
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