Nora Brugman Cabot (Barcelona, 1992) estudió Publicidad y Relaciones Públicas, pero tiene otra carrera, la deportiva, que le llevará hasta París finalmente con motivo de los Juegos Olímpicos de 2024. La barcelonesa compitió bajo la bandera de Estados Unidos durante cuatro años, entre 2016 y 2020. Como representante de España, la regatista –hace vela en la clase 470– acumula tres platas y dos oros en la competición mundial y en la europea; unas medallas que no guarda ella… sino su abuelo, su mayor apoyo y, como ella mismo dice, su ‘guardián’ de las medallas.
«Mi abuelo me vio navegar por última vez en la carrera por por la medalla del mundo. El comentarista no paraba de llamarme ‘Nora Cabot’, mi segundo apellido y el nombre de su familia. Este precioso error le proporcionó tanto orgullo y felicidad, y este recuerdo se quedará conmigo para siempre», publicó la regatista en Instagram a principios de 2024. «Aferrándome a mi promesa en tu honor, continuaré trabajando duro, tal como me enseñaste», escribió.
Con tan sólo cuatro años, Nora Brugman empezó a navegar. Sólo imaginaba una profesión para ella de mayor: deportista. Era algo que se hacía –y se veía– en su casa: su madre era esquiadora y su padre, jugador de hockey.
La joven, en una entrevista con ‘Mundo deportivo’, recordó que sus padres iban a buscarles a ella y a su hermana Atlantic –también regatista, con quien compitió– en patines. «Teníamos que patinar toda la ciudad para llegar a nuestras clases extraescolares que estaban en la otra punta», recordaba Brugman en dicha entrevista.
Aquellos padres enseñaron a sus hijas muy pronto el valor del sacrificio. «He tenido mucha suerte que desde pequeña he tenido estos valores en casa. Para mí, mis padres son las personas más sacrificadas y trabajadoras que he conocido nunca», aseguró la regatista en Radio 5. Unos padres incondicionales que no dudaron en viajar hasta Cannes (Francia), donde Nora Brugman y Jordi Xammar se proclamaron nuevos campeones de Europa de 470. «Aparecieron de repente después de terminar de trabajar a la 1 de la mañana y conducir toda la noche para poder sorprenderme. Me han enseñado que para conseguir las cosas hay que hacerlo con trabajo y esfuerzo», contó.
De hecho, Nora Brugman y su hermana Atlactic intentaron clasificarse para los Juegos Olímpicos de Tokio 2020; celebrados finalmente en 2021 por culpa de la pandemia. Sin embargo, no lo lograron. Aquello, a pesar del disgusto, unió aún más a las hermanas. Fue poco después cuando la regatista recibió la llamada del que será su compañero en los Juegos Olímpicos de París 2024, Jordi Xammar, con quien ha estado preparándose durante los últimos cuatro años. En marzo lograron el oro mundial y en mayo fueron campeones de Europa en la clase 470 de vela. «En España tenemos la suerte de tener muchísimas mujeres y muy buenas tripulantes. ¿Por qué Nora? Siempre hemos tenido un ‘feeling’ especial. Siempre nos divertimos mucho y en una campaña olímpica es muy importante llevarte bien con la otra persona», contó él.
Nora Brugman y Jordi Xammar parten como favoritos del equipo olímpico español. Ellos mismos tienen buenas sensaciones. «En el caso de Marsella, donde se van a disputar los Juegos Olímpicos, podemos tener cualquier tipo de viento. Entonces, nuestro objetivo es no tener puntos débiles en ninguna de las condiciones», aseguró ella en el espacio de Radio 5 ‘Más altas, más rápidas, más fuertes’. «Vemos que tenemos unas posibilidades muy altas de conseguir una medalla este verano en París. Obviamente, cada regata es un mundo. Lo centramos en seguir trabajando», añadió.
El lado más personal de Nora Burgman
En una entrevista con ‘Marca’, la regatista contó que, de pequeña, se le daba bien Educación Física e Historia, pero no Matemáticas. Su apodo de niña era ‘Norita’. Es fan del exfutbolista Carles Puyol, de Beyoncé, de ‘Friends’ y de ‘Harry Potter’. Duerme entre 8 y 9 horas al día y es muy familiar, tal y como se puede ver en su Instagram.