Dominic Aguilera, un joven de origen dominicano, perdió la vida por una estocada durante una riña por un auto mal estacionado en el Bronx, Nueva York.
El suceso ocurrió la mañana del jueves 18 de abril, frente a un edificio ubicado en el 37 de Featherbed Lane cerca de Inwood Avenue, mientras se disponía a desplazarse hacia su lugar de trabajo.
Aguilera, de 19 años, tuvo su último respiro en los brazos de su padre, José Cruz, después de ser apuñalado en el pecho por un conductor de Uber residente en la zona.
Su padre contó que, se estaban preparando para salir a trabajar al taller del cual es propietario cuando un vecino del apartamento de abajo en su edificio llamó a su puerta para exigirle a Aguilera que moviera su vehículo, que estaba estacionado en doble fila bloqueando el auto del atacante.
«No hubo discusión. El fue y tocó la puerta a mi casa y el niño mío bajó. Y yo le dije Dominic, espérame ahí abajo y yo bajo ahora para que nos vayamos juntos para el taller, a la ocho y algo de la mañana y no hacen cinco minutos y me lo mató ahí», sostuvo el padre de la víctima.
Aguilera bajó las escaleras y alejó su sedán Mercedes plateado unos metros, pero el atacante, identificado como Vladimir López Germán, de 45 años, permanecía enfurecido y lo apuñaló en el pecho, penetrando su corazón.
El joven, corrió a una bodega cercana a pedir ayuda donde fue alcanzado por su padre, a quien le repetía constantemente: «No me dejen morir», sin embargo, murió en el lugar.
«Vi morir a mi hijo. Falleció en mis brazos… Toda nuestra familia está en shock. Nunca esperábamos algo así», dijo Cruz.
Los paramédicos llevaron a Aguilera al Lincoln Hospital, donde fue declarado oficialmente muerto, según la Policía.
El atacante huyó a toda velocidad en un sedán de color oscuro, pero, la Policía informó por la tarde que detuvieron a López Germán y le acusaron de asesinato y posesión ilegal de un arma.