El Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE, en inglés) de Estados Unidos confirmó el arresto del empresario haitiano Réginald Boulos, a quien acusó de participar en una campaña de violencia y de estar relacionado con bandas ilegales de Haití que desestabilizan el país caribeño.
El arresto del magnate haitiano, de 69 años y antiguo aspirante a la presidencia de Haití, tuvo lugar el jueves de la semana pasada, informó en un comunicado el ICE, en el que indicó que Boulos permanece detenido a la espera de su deportación.
«El Departamento de Estado determinó que la presencia o las actividades de Boulos en Estados Unidos podrían tener graves consecuencias para la política exterior estadounidense, lo que justifica la deportación«, señaló.
Las autoridades de Inmigración acusan al empresario de participar en una campaña de violencia y apoyar a pandillas «que contribuyeron a la desestabilización de Haití».
Además, añadió que Boulos, que era residente permanente legal en Estados Unidos pero poseía la nacionalidad haitiana, no había revelado a las autoridades su participación en la formación de un partido político en Haití, así como que había sido acusado por el país insular de malversación de fondos.
Vinculación con pandillas haitianas
El Departamento de Estado informó ayer en un comunicado que había emprendido acciones contra individuos con estatus permanente legal en el país a quienes acusa de haber: «Apoyado y colaborado con líderes de pandillas haitianas vinculadas a Viv Ansanm (‘Vivimos juntos’), una Organización Terrorista Extranjera (OTE) de Haití».
El comunicado, que no reveló nombres de las personas afectadas, indicó que estas medidas incluyen la solicitud de deportación para personas consideradas culpables de cooperar con la banda haitiana.
Boulos es el fundador del Grupo Boulos y cuenta con varias inversiones en Haití, donde es considerado un político controvertido que ha ejercido una notable influencia en la política nacional.
En 2021, su nombre figuraba como uno de los potenciales candidatos a las elecciones presidenciales de ese mismo año, cuando el entonces presidente, Jovenel Moïse, fue asesinado, pero todavía no han tenido lugar por la situación volátil en Haití.