El colegio Fábrica de Armas de Toledo cuenta desde hoy con un nuevo mural en una de sus fachadas laterales, una obra del ilustrador toledano Toni Reollo que ha sido calificada por el concejal de Educación, Daniel Morcillo, como una auténtica «obra de arte». La pintura, de 3,30 metros de ancho por 2,60 de alto, está situada junto al mural que recuerda al ciclista Bahamontes y podrá ser contemplada por todos los viandantes del barrio del Poblado.
Durante el acto de inauguración, Morcillo, acompañado por el propio artista, el director del centro, Miguel Ventas, y miembros de la comunidad educativa, subrayó que la obra «plasma, con su estilo peculiar y colorido, los arcos característicos del centro, su integración en el barrio del Poblado, con la silueta del Casco al fondo, además de reflejar las distintas disciplinas que contribuyen a que este colegio sea el único considerado ‘artístico’ en nuestra ciudad».
El concejal recordó que Reollo ya dejó su sello en el colegio Europa «precisamente coincidiendo con el Día de Europa. Es un placer disfrutar de sus diseños y no descartamos que se extienda la iniciativa a otros colegios de la ciudad», afirmó.
Más allá de lo puramente artístico, Morcillo vinculó la actuación con una mejora del entorno escolar.«No sólo intentamos ofrecer propuestas didácticas, en sentido estricto, sino también iniciativas que afectan a la convivencia y al día a día de los chicos, con la intención de que los entornos sean lo más agradables posibles; de ahí que hayamos instalado toldos en colegios como San Lucas y María, Valparaíso, Santa Teresa, Ciudad de Aquisgrán y Ángel del Alcázar», aseguró.
El concejal de Educación, Daniel Morcillo, conversa con Toni Reollo, en presencia del director del colegio Fábrica de Armas, Miguel Ventas, y miembros de la comunidad educativa
«La educación no es solamente lo que se enseña, sino también cómo se vive esa enseñanza, cómo se encuentran los chicos. Y desde la Concejalía trabajamos todo lo que podemos con nuestros escasos recursos humanos, para hacerles la vida lo más agradable posible a docentes y alumnos. Nuestra concejalía siempre estará a su disposición», concluyó el responsable municipal.
Colaboración infantil
Por su parte, Toni Reollo agradeció la acogida y explicó su motivación: «He querido transmitir empatía, cercanía, ya que mi estilo es perfecto para los patios de colegios o las fachadas, como es este caso. Además, los niños, al ver a una persona que está pintando cada día y comprobar cómo evoluciona la ilustración, se sienten inspirados y colaboran, encantados, pintando ellos mismo en el mural».
El director del colegio agradeció especialmente el carácter altruista del trabajo realizado por el artista. El mural pasa así a formar parte del paisaje cotidiano de esta zona del barrio del Poblado, en una de las fachadas exteriores del centro, reforzando su vínculo con el entorno y consolidando su identidad artística.
