El cordobés Pablo Lozano, vicepresidente de Pedro Rocha en la nueva dirección de la Federación Española de Fútbol

El pozoalbense Pablo Lozano repite como vicepresidente en la Real Federación Española de Fútbol con Pedro Rocha al mando tras ser elegido presidente el pasado viernes. El que seguirá siendo presidente de la Federación Andaluza cuatro años más ostentará el cargo que ya tenía con Luis Rubiales al frente. Lozano entra a formar parte de una junta directiva compuesta por 12 hombres y ocho mujeres. Así pues, la primera acción del nuevo gobierno fue la de convocar elecciones en septiembre para los próximos cuatro años en busca de la regeneración del organismo.

La Federación Española de Fútbol (RFEF) está envuelta en un sinfín de polémicas desde la marcha de Luis Rubiales, imputado por varios delitos. Pablo Lozano mantendrá su cargo, al menos hasta el próximo mes de septiembre cuando se realicen las votaciones a la Asamblea, Presidencia y Comisión Delegada para el periodo 2024-2028. Pedro Rocha se enfrenta a una posible inhabilitación por parte del Consejo Superior de Deportes que todavía no se ha producido. El aura que rodea a la Federación está ensombrecido y todavía quedan capítulos por escribir.

FIFA y UEFA amenazaron con posibles sanciones al fútbol español que podría quedarse sin disputar la Eurocopa del próximo verano y está en peligro el Mundial 2030 que debe organizar junto a Marruecos y Portugal. Pablo Lozanos seguirá formando parte del entramado de la RFEF en su momento más crítico. El presidente de la RFAF sonó con fuerza para sustituir a Luis Rubiales en la presidencia, pero finalmente seguirá regentando el fútbol andaluz cuatro años más.

Llegó al cargo en el 2019 y ahora, intentará cerrar una etapa ya de nueve años al frente del organismo andaluz. Completará dos etapas en el cargo. En una entrevista el pasado mes de agosto, Lozano declaró que «si quieren que Andalucía esté al lado del trabajo para unir y construir, ahí nos tienen, pero si seguimos con esta confrontación, si tengo que estar fuera de donde tenga que estar, estaré».