La enseñanza bilingüe se ha convertido en una herramienta fundamental para el desarrollo de los estudiantes. El aprendizaje de una segunda lengua al mismo nivel que la lengua materna aporta una serie de extras que van mucho más allá del idioma en sí. Así lo asegura un estudio realizado en 2024 por la Asociación Española de Enseñanza Bilingüe a través del que se evaluó a más de 4.000 estudiantes de 100 centros educativos, tanto públicos como concertados, en seis comunidades autónomas. El estudio concluía que este aprendizaje también potencia habilidades críticas como la capacidad de resolución de problemas y el procesamiento de información compleja.
Pero, para que el bilingüismo sea efectivo, es necesario tener en cuenta las características de los niños y su edad. La recomendación sería clara: ¡Cuánto antes mejor! El beneficio que se puede obtener desde la etapa infantil es notable, debido a la plasticidad del cerebro y que facilita el aprendizaje de los idiomas de forma natural.
«Todas las familias desean que sus hijos sean bilingües, pero hay que destacar que esta meta no debe conseguirse de cualquier forma. Es muy importante que nuestros hijos adquieran una sólida competencia en idiomas sin que ello sea a costa de perder competencias en el resto de las materias y en la lengua nativa», explican desde el Colegio Amanecer de Madrid, que en 2013 obtuvo el reconocimiento como primer Cambridge English School de España. Este colegio aboga por un bilingüismo equilibrado, de calidad, óptimo, práctico y eficiente. «Consideramos que el inglés no es una materia a aprender, sino una herramienta de comunicación para que el alumno se enfrente a las diversas situaciones reales que afrontará en su vertiente personal y profesional. Nuestro objetivo es favorecer un aprendizaje progresivo, eficaz y global, más allá de una mera acumulación de conocimientos teóricos y nada prácticos», afirman.
En el caso del Liceo Europeo de La Moraleja (Madrid) explican que el principal desafío es garantizar que los alumnos adquieran un dominio sólido en ambos idiomas sin perder riqueza en su aprendizaje. «Lo logramos con una inmersión natural, docentes altamente cualificados y un enfoque personalizado que respeta los ritmos individuales de cada estudiante -explican-. Para nosotros es fundamental diferenciar entre un centro que simplemente imparte inglés o que ofrece programas en modalidad bilingüe y un modelo de inmersión total en el idioma. En Liceo Europeo hemos apostado firmemente por la inmersión lingüística real, destinando los recursos necesarios para atraer un equipo docente nativo y altamente cualificado. Este enfoque no solo garantiza un dominio profundo del idioma, sino que también enriquece a nuestros alumnos con una visión global y una auténtica apertura a otras culturas».
En el caso de The British College of Gavà (Barcelona), este centro ofrece a sus alumnos un entorno multilingüe desde una edad temprana. La educación del colegio sigue el currículum nacional británico, lo que garantiza que los estudiantes estén inmersos en un entorno en el que el inglés se habla de manera constante. Además, como parte integral del currículo, se incluyen asignaturas en castellano, a partir de los 4 años; catalán, desde los 6 años; y francés, desde los 8 años, lo que permite a los alumnos adquirir una sólida base en varios idiomas.
«Al impartir las clases desde temprana edad, los alumnos comienzan un proceso natural de aprendizaje de todos estos idiomas. Sin embargo, sabemos que este proceso puede presentar desafíos para los estudiantes que ingresan a la etapa de secundaria, especialmente si no han tenido una exposición constante a alguno de los idiomas. Por eso, en el colegio implementamos una metodología en clase que se adapta a las necesidades individuales de cada alumno. También contamos con el departamento de Inglés como Lengua Adicional (EAL), que ofrece clases