El dolor neuropático está considerado uno de los más intensos y difíciles de tratar que altera la estimulación de los receptores para el dolor. El diagnóstico es sugerido por un dolor desproporcionado respecto de la lesión tisular que, además, es resistente a los analgésicos convencionales. El equipo de Medicina Física y Rehabilitación del Hospital Universitario de Valme de Sevilla, ha logrado, sin embargo, reducirlo al mínimo en un caso concreto gracias a un abordaje muy innovador que ha sido reconocido y le ha hecho merecedor del tercer premio al «Caso Clínico de Dolor» del 76º Congreso de la Sociedad Andaluza de Medicina Física y Rehabilitación (SAMFYRE), celebrado en Granada. El trabajo, presentado por los residentes Andrea Castro, Lucía Medina y Adrián Rosales, se centra en el manejo del dolor neuropático secundario a quemaduras severas a través de la terapia del parche de capsaicina.
A pesar de los avances en el manejo de las lesiones de este tipo y en las tasas de supervivencia de los afectados, el 80 por ciento de los pacientes continúa padeciendo dolor neuropático como secuela con una prevalencia estimada de hasta el 80 por ciento. Este dolor neuropático comprometía al sistema nervioso somasensorial y producía una sensación de dolor punzante. Su impacto en la calidad de vida de los pacientes afecta no sólo al bienestar físico, sino también al psicológico y social, puesto que limita la movilidad, interfiere en el sueño y reduce la capacidad de realizar actividades diarias, lo cual puede derivar en ansiedad y depresión. Afecta, pues, a la autonomía del paciente, a su desempeño laboral y a sus relaciones interpersonales. Y estos tres profesionales han llevado a cabo un enfoque terapéutico integral para su manejo.
El joven paciente tratado tenía limitación funcional significativa, alta dependencia y escasa tolerancia a los tratamientos farmacológicos convencionales, con lo cual su manejo se convirtió en reto clínico con un abordaje terapéutico complejo. La estrategia aplicada resultó eficaz y redujo la discapacidad derivada de este dolor crónico y la incidencia de sus efectos adversos y los de la analgesia convencional.
El servicio de Medicina Física y Rehabilitación del Hospital Universitario de Valme de Sevilla ha brillado también con otros dos premios presentados por médicos adjuntos y residentes en el 76º Congreso de SAMFYRE, el máximo exponente del quehacer andaluz de esta especialidad médica.
Los tres trabajos galardonados exponen casos de pacientes con el denominador común de la complejidad de su abordaje frente al dolor y la obtención de resultados satisfactorios mediante enfoques terapéuticos innovadores. La doctora y tutora Laura García destaca cómo la investigación «se ha convertido en una dinámica de nuestra formación especializada como exponente de calidad docente, traduciéndose este esfuerzo en la mejora continua de la asistencia con prácticas clínicas y opciones terapéuticas innovadoras avaladas por la evidencia científica».
El premio al mejor póster del Congreso lo mereció un trabajo centrado en la resolución de cuatro casos de pacientes con síndrome de trocánter mayor, causante de dolor lateral de cadera crónico. Su prevalencia entre la población es de un 10-25%, siendo más común en mujeres de mediana y avanzada edad. Aunque el manejo inicial es conservador con fisioterapia, analgesia y modificaciones biomecánicas, un porcentaje de casos evoluciona a dolor crónico refractario. El trabajo premiado, firmado por los médicos rehabilitadores Luis Eduardo Alarcón y José María Delgado y los residentes Adrián Rosales, Andrea Castro y Lucía Medina. expone la técnica del bloqueo que ha los resultados óptimos en cuatro pacientes.
La técnica consiste en el bloqueo del nervio glúteo superior con procedimientos ecoguiados como un reto terapéutico en el síndrome de trocánter mayor refractario a terapias conservadoras. La resolución de los cuatro casos clínicos,con la disminución del dolor y activación de la funcionalidad de los pacientes, «puede configurarse como una nueva alternativa terapéutica en esta patología de carácter refractario», según estos especialistas.
Radiofrecuencia pulsada
El primer premio al Mejor Caso Clínico de Dolor del congreso ha correspondido al trabajo presentado por los médicos rehabilitadores Luis Eduardo Alarcón y Virginia Toro junto al residente Adrián Rosales. Se trata del abordaje por radiofrecuencia pulsada en dolor de pie con limitación funcional por síndrome de dolor regional complejo. El doctor Alarcón destaca que se trataba de «un dolor con tres años de evolución secundario a fractura en un paciente de mediana edad al que, tras ser intervenido y no responder a la fisioterapia dirigida, aplicamos una rehabilitación intervencionista con bloqueos nerviosos y radiofrecuencia guiada con ecografía».
La radiofrecuencia pulsada, usada también en algunos casos de medicina estética, está indicada para diversos tipos de tratamientos del dolor y sus aplicaciones para el tratamiento del nervio periférico van en aumento. En este caso, los rehabilitadores aplicaron la técnica en dos nervios: el peroneo superficial, comúnmente afectado en síndrome de dolor regional del pie y tobillo; y el nervio sural, donde el traumatismo es la causa de lesión más frecuente y éste tiene carácter sensitivo proporcionando inervación en pie y tobillo.
Los especialistas aplicaron esta terapéutica innovadora en un síndrome con sintomatología incapacitante y dolorosa, de modo que el paciente de mediana edad «ha visto reducido el dolor y su funcionalidad, aportándole calidad de vida que le ha permitido volver a sus actividades básicas y profesionales del día a día«, explica el doctor Alarcón.
Más de un centenar de profesionales
El servicio de Medicina Física y Rehabilitación del Hospital Universitario de Valme lo conforman más de un centenar de profesionales de diversas categorías: médicos rehabilitadores, residentes, fisioterapeutas, TCAE, terapeuta ocupacional, logopedas, celadores y administrativos. De ellos, más de una veintena de facultativos y residentes.
Da cobertura a todo el área sur de la provincia y se coordina con los centros periféricos de especialidades de Alcalá de Guadaira, Dos Hermanas y Morón de la Frontera junto al Centro de Alta Resolución de Los Alcores, y los hospitales de alta resolución de Lebrija, Morón de la Frontera y Utrera.
El volumen de pacientes atendidos anualmente supera los 61.000 y ha realizado 3.150 intevenciones, lo que supone un incremento del 36,3% respecto a 2023. En 2024 ha aplicado la ecografía músculo-esquelética en más de 3.100 actos clínicos frente a los 2.310 del año anterior. Y casi ha cuadriplicado la cifra del balance anual del año 2018 donde se hicieron 682 actos clínicos.
Destaca el amplio abanico de abordajes intervencionistas como ecografía articular y de partes blandas, ecografía en el síndrome de túnel carpiano, intervencionismo ecoguiado de infiltración articular y partes blandas, intervencionismo ecoguiado en espasticidad,infiltración en la hiperhidrosis del muñón en el paciente amputado, infiltración en la sialorrea y bloqueos nerviosos.