“Cada cosa a su tiempo”. A la portavoz titular del PP en el Senado, Alicia García, no le traicionó ningún subconsciente porque lo quiso decir muy claro. El PP quiere usar y usará su mayoría absoluta en la Cámara alta para estirar todo lo posible la comisión de investigación formada allí en marzo pasado sobre el llamado caso Koldo para ampliar su foco ahora hacia lo que buscan convertir en el caso de corrupción de “Pedro Sánchez, Begoña Gómez y de todo el Gobierno” tras las recientes revelaciones e investigaciones que afectan al exministro socialista José Luis Ábalos. García lo anunció este viernes, el Senado ampliará los objetivos de esa comisión en los próximos días y dejará “para cuando nos convenga mejor”, según fuentes de ese grupo, la citación al propio presidente y su esposa. Las dos comisiones de investigación montadas en el Congreso y el Senado relacionadas con este caso apenas han citado, en su primera fase, a 52 de los más de 260 comparecientes previstos y los llamados tampoco han aportado novedades.
El PP anunció este viernes que promoverá en la próxima mesa del Senado, donde dispone de mayoría, la ampliación de los objetivos declarados hasta ahora en la finiquitada comisión de investigación del caso Koldo. Y, además, demandará la presencia por ahora de 10 nuevos comparecientes. Todo un plan encaminado a enfocar esos trabajos volcados en teoría y en principio sobre las posibles irregularidades y problemas en los contratos de las administraciones para comprar mascarillas y material sanitario durante la pandemia para fijarse ahora más en “la corrupción de todo el Gobierno” de Pedro Sánchez.
Los trabajos de la anterior comisión que empezaron en marzo en la Cámara alta, con el objetivo de convocar a más de 130 personas, acabaron antes del verano habiendo llamado a apenas una treintena, sin grandes aportaciones y con una sensación bastante extendida de frustración, interna en el propio PP y generalizada entre los observadores de las sesiones. El balance tampoco fue mucho mejor en las 15 reuniones fijadas en paralelo en el Congreso, donde se citó a 21 de los 134 comparecientes aprobados (28,1%).
Ya en el inicio del caso Koldo el PP de Alberto Núñez Feijóo intentó extender el escándalo y sus ramificaciones a todo el PSOE y especialmente al presidente Sánchez y su esposa. Las últimas novedades judiciales y el informe de la UCO de la Guardia Civil sobre el “papel relevante” del exministro Ábalos en la presunta trama han revalidado esa estrategia, que se pretende instalar los próximos meses muy particularmente en el Senado, donde el PP puedo imponer sus pretensiones y el calendario.
La portavoz popular en esa Cámara, Alicia García, lo refrendó este viernes. “Todos los caminos de la trama corrupta empiezan y terminan con Sánchez”, apuntó García y apostilló luego que Sánchez “no sólo es el número 1 de esta trama, sino la X de la misma. Mintió, lo sabía y lo tapó. Ahora sabemos que daba su visto bueno al rescate de Air Europa, a la visita de Delcy o los contratos por recomendación de su mujer”. Y como colofón remató: “Sánchez es el padrino de la trama, todos los caminos de la corrupción empiezan y acaban en La Moncloa con el presidente del gobierno”.
El PP, ahora, quiere “articular” sus próximos movimientos especialmente en el Senado para “alargar esta situación lo máximo posible para dañar a Sánchez” y al PSOE, por lo que sigue sin querer concretar cuándo le llamará a declarar a la comisión en una línea de acoso que ha marcado el propio Feijóo en sus declaraciones. Alicia García solo quiso comentar este viernes que el presidente “vendrá” y precisó que lo hará si es que antes “no dimite o convoca elecciones”, que es un mantra que repiten dirigentes del PP. Tampoco acaban por esclarecer en el PP si harán lo mismo con la esposa del presidente, Begoña Gómez, porque hay debate interno en el partido sobre los posibles beneficios o costes de convocarla y traspasar esa línea política.
Los próximos pasos que dará el PP en esa nueva comisión ampliada en el Senado se centrarán, en un primer bloque, en llamar a altos cargos del Ministerio del Interior, desde el ministro, Fernando Grande-Marlaska (24 de octubre), a otros mandos, también de la Guardia Civil (el director general irá el 28) o a comandantes del cuerpo armado que figuran en las conversaciones pinchadas en la investigación de la UCO sobre Ábalos y su exasesor, Koldo García. La segunda fase de ese plan de trabajo pasará en noviembre por poner el foco en Begoña Gómez y sus presuntos contactos en diversos ámbitos, como el empresario Barrabés o el ex CEO de Air Europa, Javier Hidalgo (7 de noviembre), la empresa rescatada por el Gobierno como muchas otras por las repercusiones de la pandemia.
