Telefónica ha cumplido un hito: alcanzar los 100 años de historia. La compañía, que está de celebración, ha conmemorado el centenario con un acto en la Bolsa de Madrid con el tradicional toque de campana protagonizado por el presidente de la operadora, José María Álvarez-Pallete.
Al acto han asistido en torno a 150 personas del ámbito económico y bursátil al que no ha podido faltar el Rey Felipe VI. Un día de gala para resaltar los resultados logrados durante todos estos años. La empresa multinacional española está presente en 12 países, emplea a 1,3 millones de personas, directa e indirectamente, ha multiplicado por 165 su valor de mercado y genera un impacto de 49.000 millones de euros en términos de PIB (en los países en los que opera).
El Rey Felipe VI y Telefónica han querido revivir uno de los momentos icónicos de la teleco española. Junto con el presidente de la compañía, José María Álvarez-Pallete, han replicado el histórico momento en el que su bisabuelo Don Alfonso XIII, inauguró la sede de la compañía en la madrileña calle de Gran Vía.
Entonces, el Rey Alfonso XIII contemplaba el crecimiento de Madrid desde la terraza del edificio de Telefónica en Gran Vía junto a quien era el presidente de la operadora, Estanislao de Urquijo. Ahora, el rey Felipe VI aparece junto a Alvarez-Pallete.
Este recorrido por la trayectoria de Telefónica pone de relieve la «profunda transformación» que la sociedad y la economía española ha vivido en los últimos 100 años, en los que la operadora ha sido «testigo y protagonista directo» de esa modernización.
Hace 100 años, la llamada del rey Alfonso XIII al presidente de Estados Unidos, Calvin Coolidge, abría una nueva era de comunicación en España, y en esta ocasión don Felipe vislumbra la apuesta de Telefónica «para liderar la era digital con el encendido de su red inteligente de telecomunicaciones, la más moderna de Europa y una de las mejores del mundo, tras decir adiós al legado de cobre», ha señalado la compañía en un comunicado.
Telefónica se constituyó el 19 de abril de 1924 con el nombre de Compañía Telefónica Nacional de España con un millón de pesetas. Durante los primeros años la teleco española tuvo respaldo de la operadora estadounidense ITT con el apoyo de inversores españoles y el Marqués de Urquijo como primer presidente. A partir de los años 40, las comunicaciones comenzaron a popularizarse y el Estado adquirió una participación de casi el 80%. Sin embargo, se privatizó a la compañía mediante dos ofertas públicas de acciones: una en 1995 con el Gobierno de Felipe González y otra en 1999 con el Gobierno de José María Aznar.