El Sabadell se refuerza frente a la oferta pública de acciones (opa) lanzada por BBVA tras haber elevado su beneficio neto en el primer trimestre del año un 58,6%, hasta los 489 millones de euros, y haber mejorado la retribución a los accionistas en 100 millones.
La entidad, con estos números, pretende seducir a sus inversores, que podrían tener que decidir el resultado de la operación en los próximos meses, aunque todo dependerá de las condiciones que imponga el Gobierno tras la consulta pública puesta en marcha por el Gobierno, después de que la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) la haya autorizado por unanimidad.
El Sabadell explica que sus cuentas se han visto impulsadas por unos mayores volúmenes gracias «a la robusta evolución de la actividad comercial, la mejora de la calidad de los activos, y por lo tanto el descenso de las provisiones, así
como por el crecimiento de la filial TSB». Con ello, los resultados están alineados con los objetivos financieros fijados para 2025, para poder seguir en solitario.
El consejero delegado, César González-Bueno, ha destacado en el inicio del ejercicio «continuamos ofreciendo mensajes positivos» y ha añadido que «tenemos un modelo de negocio claro, que funciona cada vez a mayor velocidad y que nos da una gran capacidad de generación de capital para nuestros accionistas».
Tras haber elevado las expectativas, el Sabadell ha incrementado hasta los 1.300 millones los dividendos previstos para el conjunto de 2025, con lo que la suma de la retribución que pretende ofrecer a los inversores aumenta hasta los 3.400 millones en dos años, incluyendo los planes de recompra.
Los resultados se han sustentado también en una bajada de la contribución del impuestazo al sector, como en el resto de entidades salvo Caixabank. El Sabadell ha contabilizado 31 millones, frente a los 192 millones del año pasado tras el cambio de modelo aplicado por el Gobierno. Se estima en el curso actual tendría que abonar a las arcas por este concepto unos 125 millones, menos de lo previsto inicialmente. Sin este efecto, el beneficio de la entidad catalana habría crecido un 14% entre enero y marzo.