Al menos 5 familias del sector María Galá, en Los Jardines del Norte, no han regresado a sus casas desde las lluvias del 18 de noviembre pasado, debido a que se anegaron hasta el segundo nivel y las aguas dañaron casi todos sus ajuares.
La situación de las familias es de incertidumbre cuando comienza a llover, sobre todo luego que se construyera un dealer o negocio de venta de vehículos en la avenida Los Próceres, que redujo a solo un metro y medio el cauce de una cañada, lo que hace que las aguas se represen, se desborde y penetre a las viviendas.
Moradores explicaron que han dado parte al Ministerio de Obras Públicas, a la Alcaldía del Distrito Nacional y a la Corporación del Acueducto y Alcantarillado de Santo Domingo (Caasd) y todas han enviado a investigar el caso, pero no han vuelto por el lugar.
Martha Andújar vive alquilada en otra área del sector desde noviembre del año pasado porque su casa se llenó por completo de agua durante las lluvias de ese mes y las marcas dejadas por las aguas sucias muestran que apenas faltaron unas dos pulgadas y media para llegar al techo.
Por la calle Proyecto el agua corre como un río y se acumula en la cañada porque el espacio de circulación fue bloqueado por la construcción de una pared de un concesionario de vehículos de motor.
«Ahora le pedimos a la alcaldesa que nos ayude a que volvamos a nuestras casas, ella es una buena persona, quizás ella nos pueda dar una mano amiga», dijo Andújar.
Angel Ogando dijo que la situación es grave: «A partir de la construcción de ese dealer ha sido un pandemónium porque en contubernio con las autoridades actuales de Medio Ambiente permitieron la construcción encima se la cañada y esa pared está a punto de colapsar».
Dijo que como propietarios de viviendas están en la disposición de paralizar el tránsito en la avenida Los Próceres hasta que las autoridades vayan a solucionar el problema y alertó que se declaran en sesión permanente porque han agotado todos los recursos pacíficos.
«La comunidad está en disposición de lo que ellos quieren, si ellos quieren un muerto para solucionar este problema, lo van a lograr porque ya estamos hartos, aquí hay una inversión millonaria.
Desiré Quezada, miembro de la junta de vecinos del sector María Galá, dijo que ahora todo el sector está en peligro cuando llueve por el desborde de la callada y las frecuentes construcciones al borde de ese afluente de la cañada de Los Ríos.
Gabriel Quezada, otro afectado, dijo que antes no había problemas a pesar de que al lugar baja agua de la Núñez de Cáceres, de Maria Galá de la calle Gardenia y Los Jardines, pero el principal causante de las inundaciones es el dealer.