La historia de Sara Millerey es una historia de odio, de horror, de transfobia. Esta mujer trans, de la que muchos vecinos han afirmado «que no molestaba a nadie», fue víctima de un inhumano ataque por el simple hecho de ser transexual. La mujer falleció el domingo pasado tras pasar por una terrorífica y cruel experiencia en el municipio de Bello, en el departamento de Antioquia.
Sara fue agredida y luego arrojada al río en Playa Rica después de romperle los brazos y las piernas. La mujer no pudo superar tal calamidad y falleció en el hospital tras pasar por la aterradora experiencia durante al menos dos horas. Nadie la ayudó, nadie la rescató, pero lo que sí hizo la gente, demostrando menos humanidad que cualquier animal, fue grabar en vídeo a la mujer de 32 años mientras luchaba por no ahogarse. Un vídeo que fue subido en redes sociales, donde se viralizó rápidamente.
«A Sara no solo la mataron. Le quebraron los huesos, la arrojaron a una quebrada y la dejaron morir lentamente en soledad (…) Y mientras eso pasaba alguien sacó el celular y grabó, no para ayudar, no para denunciar, no para salvar, (sino que) grabó para viralizar, para entretener, para hacer del horror un espectáculo», agregó Caribe Afirmativo, una organización que trabaja por el reconocimiento de los derechos de las personas con orientaciones sexuales, identidades y expresiones de género diversas en Colombia.
El Ministerio del Interior pidió este miércoles acelerar la investigación para judicializar a los responsables del crimen de esta mujer «e implementar las acciones judiciales a las que haya lugar». «El Ministerio, a través de su instancia ‘Mesa Nacional de Casos Urgentes LGBTI’, emitió una comunicación a las entidades del orden nacional, departamental y municipal, para que tomen acciones frente al caso e implementen medidas de prevención ante los altos índices de violencia contra la población LGTBIQ+ en Antioquia», agregó esa cartera en un comunicado.
La Gobernación de Antioquia, por su parte, ofreció hasta 50 millones de pesos (unos 11.260 dólares) por información que permita detener a los responsables del crimen de González. «El Departamento condena este homicidio y el dolor que ella sufrió», agregó la Gobernación en X.
La Defensoría del Pueblo aseguró que «la identidad y expresiones de género, deben ser respetadas y reconocidas sin excepción». «Hacemos un llamado a la sociedad para que no se siga naturalizando el odio y el prejuicio, y a todas las entidades del Estado para que su acción proteja, garantice y dignifique las vidas de las personas transgénero», añadió ese organismo.
Según cifras de la Fiscalía recogidas por el Ministerio del Interior, el año pasado fueron asesinadas 29 personas trans en el país, cinco de ellas en Antioquia. Sin embargo, en lo que va corrido de este año han sido registrados 13 casos, seis de ellos en ese departamento, lo que preocupa a las autoridades.
El Observatorio de Derechos Humanos de Caribe Afirmativo cifra además en 24 las personas LGBTIQ+ asesinadas en lo que va corrido de este año, de los cuales 13 crímenes han sido cometidos en Antioquia.
«Durante el año 2024, desde la Defensoría del Pueblo acompañamos a 287 personas víctimas de violencia por prejuicio en razón de su identidad y/o expresión de género: 254 mujeres transgénero y 33 hombres transgénero», expresó, por su parte, ese organismo.
* Si has sufrido o sufres discriminación por tu género, llama al 028, también conocido como teléfono Arcoíris. Este es un servicio de información y atención a víctimas de delitos de odio y de discriminación anónimo, gratuito, confidencial y accesible, que está disponible las 24 horas del día y los 365 días del año.