Ineco fichó a Jésica Rodríguez sin publicar una oferta. La empresa pública explica en los informes que ha remitido al Tribunal Supremo que las directrices vigentes en ese momento no exigían su publicación. «En la mayoría de los casos, sobre todo en aquellos perfiles sin necesidad de alta cualificación técnica específica, como es este caso, no se publicaban las vacantes», reconoce el ente adscrito al Ministerio de Transportes en la documentación a la que ha tenido acceso THE OBJECTIVE. La expareja del exministro José Luis Ábalos aseguró el pasado 27 de febrero ante el juez que cobrara sin acudir a trabajar.
Jésica Rodríguez estuvo vinculada a Ineco desde marzo de 2019 a febrero de 2021. Desarrolló tareas de auxiliar administrativo como refuerzo en proyectos de ADIF. La empresa pública de ingeniería acredita que la joven trabajó 3.684 horas, aunque los investigadores sostienen que no acudía y que el hermano de Koldo García, asesor ministerial de Ábalos, se encargaba de rellenar sus partes para camuflar su puesto de trabajo fantasma. Joseba García negó los hechos en el Supremo, que solicitó entonces más información al respecto.
El ente público remitió este viernes una vasta documentación al juez que investiga si Ábalos recibió contrapartidas económicas por adjudicar la compra de mascarillas en la pandemia. En sus casi 300 páginas explica que solo entrevistó a Jésica Rodríguez para el puesto que acabó logrando, como ocurría en esa época con la mitad de los casos. Todos esos procesos, por tanto, se limitaba a un solo candidato que, según las fuentes consultadas por este diario, solían ser personas del círculo de confianza de empleados y altos cargos.
La entrevista a Jésica
La elección se limitó al análisis del currículo que realizaron los técnicos y a un estudio salarial, según especifica la documentación remitida al Supremo. Ineco tampoco convocó un proceso selectivo ni ofertó el puesto porque la normativa vigente desde 2016 no exigía la publicación de las vacantes, especialmente cuando no eran cargos de alta responsabilidad.
«A este respecto cabe destacar que, tras la entrada en vigor a finales del procedimiento de gestión de altas y bajas de personal, que sustituyó a las directrices aprobadas y vigentes desde 2016 para la selección de personal, y las acciones implementadas a lo largo de 2022 y 2023 de monitorización y seguimiento de la gestión de recursos humanos, se ha conseguido dotar a Ineco de un modelo robusto y digitalizado que ha permitido reforzar los estándares de control», reconoce la empresa pública en su escrito.
Ineco abunda en que «el nuevo modelo de gobernanza del talento impulsado en diciembre de 2022 ha permitido el perfeccionamiento de los procedimientos internos de control y desarrollo profesional». Jésica Rodríguez se encargaba, entre otras cosas, del registro de documentación, el seguimiento de incidencias en los expedientes, su gestión, el archivo de documentación y la redacción de actas de reuniones y comisiones. Los técnicos valoraron con nueve puntos sobre diez su paso por la empresa pública.
Durante los dos años que permaneció Jésica Rodríguez en Ineco estuvo asignada a dos proyectos de ADIF, siendo el encargado de ambos Ignacio Zaldívar, entonces director de gestión administrativa en el gestor de infraestructuras ferroviarias. Los mensajes intervenidos por la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil señalan que tuvo una importancia vital en el salto de la expareja de Ábalos a otra empresa pública.
El papel de Pardo de Vera
Jésica Rodríguez pregunta a Koldo García en noviembre de 2020 por la extensión de su contrato en Ineco. El asesor le respondió con un escueto: «Febrero». Sin embargo, días más tarde la entonces presidenta de ADIF, Isabel Pardo de Vera, avisó al hombre de confianza de Ábalos para comunicarle que se había complicado la renovación. No obstante, le indicó que la joven ya había hablado con Zaldívar, que le habría propuesto continuar seis meses en Tragsatec.
Los investigadores subrayan que Pardo de Vera se involucró personalmente en la contratación de Jésica Rodríguez en Ineco. De hecho, se intercambió con Koldo García una serie de mensajes relativos a la entrevista de trabajo de la joven, cuyo contacto de teléfono incluso le facilitó. Una versión que contradice su declaración judicial como testigo.