El exasesor de Izquierda Unida en Oviedo, que este lunes renunció a todos sus cargos orgánicos tras ser acusado de violencia sexual a través de redes sociales, ha sido suspendido cautelarmente de militancia por la dirección regional del partido en Asturias. La decisión se ha tomado en una reunión de los órganos competentes de la coalición a nivel autonómico, tras recibir el informe de la Comisión de Cuidados de IU, a la que se había remitido toda la información sobre el caso.
La secretaria de Políticas de Igualdad de Izquierda Unida Asturias, Begoña Collado, explicó que la suspensión provisional se decidió después de analizar el informe elaborado por la Comisión de Cuidados. Según el informe, el acusado se declara inocente y ha manifestado su intención de iniciar acciones legales para defenderse de las acusaciones que se hicieron públicas el domingo en Instagram, lo que le llevó a renunciar a sus cargos el lunes por la tarde.
En la denuncia publicada en un grupo de esta red social, una mujer relata un episodio en el que el hombre aprovechó su estado de embriaguez para intentar forzarla con violencia en su domicilio, ante lo cual la supuesta víctima se vio obligada a huir. Izquierda Unida fue conocedora de la denuncia durante la noche del domingo y actuó dando traslado el lunes del contenido al órgano federal correspondiente.
La presunción de inocencia y la actuación del partido fueron destacados por Collado, quien afirmó que, aunque defienden el derecho a la presunción de inocencia, también consideran su deber como organización apartar de militancia a esta persona hasta que se resuelvan las acusaciones. Hasta el momento, según la información del partido, las acusaciones se limitan a denuncias anónimas en redes sociales.
Collado también señaló que, por la información disponible, no consta que se hayan presentado denuncias ante sede judicial, y recalcó que esto es algo que desde Izquierda Unida no tienen por qué conocer. Además, afirmó que en ningún momento se han producido denuncias internas sobre esta persona a través de los canales habilitados por el partido para este efecto.
«Dentro de nuestra organización y en los años que lleva de militancia este compañero nunca tuvimos ninguna muestra ni señal que nos hiciera saltar ninguna alarma», concluyó Collado, resaltando la sorpresa ante las acusaciones y la falta de precedentes que pudieran haber alertado al partido sobre comportamientos inapropiados del ahora suspendido.
