Cuando llegue a Roma el Cachorro, el primer lugar donde recibirá culto será nada más y nada menos que a pocos metros de la tumba de San Pedro, el apóstol al que le dijo Cristo que sobre él edificaría su Iglesia. El crucificado trianero y … la Virgen de la Esperanza de Málaga estarán en la capilla de San José, en el transepto y en uno de los lados del baldaquino de Bernini. Se trata de uno de los espacios más importantes de la basílica vaticana y, como curiosidad, originariamente no estaba dedicado al esposo de la Virgen María.
El actual altar fue bendecido por el papa Juan XXIII el 19 de marzo de 1963 y, anteriormente, estaba dedicado a los apóstoles Simón y Judas Tadeo porque hay un sarcófago con reliquias de estos santos. Este cambio fue encargado por el Pontífice que convocó el Concilio Vaticano II y la pintura de Achille Funi fue presentada al estudio de mosaicos dos años antes de su bendición. Antes, hubo una pintura de 1630 de Agostino Ciampelli que representaba a los mencionados Simón y Judas Tadeo.
En febrero de 1814, esta pintura fue reemplazada por el mosaico de la Crucifixión de San Pedro de Guido Reni, que había estado en la sacristía. El altar dedicado a Simón y Judas fue decorado entonces por dos óvalos de mosaico que representaban a los santos en las paredes a los lados del retablo.
Aunque no se sabe la disposición final del crucificado trianero y la dolorosa malagueña, según los datos que se conocen es que se ha descartado que conformen un Stabat Mater. De todas formas, todos los devotos y cofrades que se acerquen a venerarlos desde el miércoles 14 al jueves 16 podrán ver los capiteles que coronan las columnas a los lados de los altares en diversos materiales.
Esculturas del crucero y la cúpula diseñada por Miguel Ángel
A pocos metros de ese retablo donde se oficiará una eucaristía en la mañana del viernes 16 de mayo, se encuentra el famoso baldaquino de Bernini que ha sido restaurado para el Año Jubilar, así como las cuatro esculturas que están en los pilares que sustentan la cúpula de San Longinos, Santa Elena, Santa Verónica y San Andrés. La mirada del Cachorro se elevará hacia la cúpula que se construyó primero bajo la dirección de Miguel Ángel y tras el fallecimiento del mismo, de su discípulo Giacomo Della Porta.
Las imágenes estarán en este altar de San José hasta la noche del viernes 16, momento en el que serán trasladadas a las grandes carpas de la vía Claudia para la procesión del día siguiente en la que recorrerán los alrededores del Coliseo y del Circo Máximo junto con otras tallas venidas de diferentes puntos de Portugal, Francia e Italia. Asimismo, cabe recordar que el Nazareno de León recibirá culto los días del Jubileo de las Cofradías en la basílica de Sant´Andrea della Valle.
Allí, la cofradía leonesa celebrará misa de hermandad durante la mañana del viernes 16 de mayo y la imagen de Nuestro Padre Jesús Nazareno se encontrará expuesta en besapié y veneración extraordinaria durante todo el día.