La procuradora general de la República, Miriam Germán Brito, informó que el Centro de Privación de Libertad de La Victoria, no está en condiciones técnicas para recibir nuevos ingresos de personas con medidas de coerción de prisión preventiva, hasta nuevo aviso.
En ese sentido, la procuradora general le envió una comunicación el pasado 20 de marzo al presidente de la Suprema Corte de Justicia, Luis Henry Molina, donde le solicita que el cumplimiento de las medidas privativas de libertad sea dispuesto en otros centros.
La medida de se debe al incendio que afectó las áreas 3 y 4 del Patio de La Victoria, dejando hasta el momento a 13 personas muertas y varios heridos.
El comunicado expresa que en tales circunstancias la Cárcel de La Victoria “no está en condiciones técnicas de recibir nuevos ingresos”.
“Solicitamos que canalice esta información a las jurisdicciones afectadas por esta situación, a fin de que, en caso de que un juez o tribunal imponga medida de coerción consistente en prisión preventiva, su cumplimiento sea en otro centro”, sostiene la misiva.
El comunicado destaca que tan pronto concluyan los trabajos de readecuación de las áreas afectadas, se informará para retomar las labores relativas al nuevo ingreso de reclusos.
Las cárceles: producción de mafias
La Fundación Institucionalidad y Justicia (Finjus), señala que bajo las condiciones en que opera el sistema penitenciario en el país, es imposible que quienes han delinquido tengan la oportunidad de reincorporarse a la sociedad.
La Finjus sostiene que las estructuras, normas y principios que recoge la legislación vigente han quedado inoperantes y sumergidas en prácticas carcelarias que se han convertido en la producción de mafias y entramados delictivos que se multiplican a gran escala.
La fundación propone formar una estructura integral que minimice y atenúe los entramados mafiosos con el que ya cuenta el sistema, de lo contrario el modus operandi migrará en igual o peor escala.
Propone preparar agentes para mejorar cárceles
La Finjus resalta que el tema de hacía dónde se van a trasladar los internos de la sobrepoblada Cárcel de La Victoria, no es la única cuestión por tratar.
¿Ya se cuenta con los agentes (personal militar y administrativo) con entrenamiento especial para entrar en funcionamiento?, cuestiona la Fundación Institucionalidad y Justicia.
Recalca que se deben adoptar medidas que se centren en preparar el personal que se hará cargo de los nuevos recintos carcelarios. La Finjus plantea un compromiso nacional entre varios organismos y entidades para alcanzar soluciones realistas y sostenibles.