Jennifer Valle (Madrid, 1993) siempre tuvo curiosidad por la cocina. Y esa singularidad no slo le ha llevado a ser una gran chef desde una edad muy temprana sino a lograr, gracias a su perseverancia, un premio que ansiaba, coronarse en la Gua del Cachopo con el mejor de Madrid y rozar -qued subcampeona- el mejor del mundo.
Sus primeros pasos en torno a los fogones los dio en el Colegio Fuenllana, en Alcorcn. All estudi un par de aos un grado medio. Quera estudiar en Le Cordon Bleu, pero la economa familiar no daba para eso. Eran 50.000 euros, cuenta en conversacin con GRAN MADRID. Aunque no estudiar en esa escuela premium no ha supuesto ningn freno a esta cocinera, de ideas claras y trabajo constante.
Su primera experiencia laboral, all por 2014, no pudo ser mejor. Ech un currculum en Infojobs y tuve mucha suerte porque me llamaron para trabajar para el Grupo Sinergia en la apertura de Platea. Fue la oportunidad de mi vida, recuerda. Aprend todo lo bueno de la gente con la que trabajaba y me di cuenta de que no me haba equivocado de camino, seala despus de contar que haba dudado con la medicina. En los aos que estuvo all, fue escalando desde ayudante de cocina a jefa de puesto, siempre de la mano del chef Gustavo Valbuena y, tambin, de los estrella Michelin Marcos Morn, Pepe Solla y Paco Roncero.
Aunque ellos no han sido los nicos que han dejado una huella imborrable en esta joven cocinera. Se col en la apertura de Bocanegra (Villanueva del Pardillo), donde trabaj a las rdenes de Ramon Caro -chef de Atrio (Cceres) y reconocido tambin por la famossima Gua Micheln-. Fue mi mentor. Aprend muchsimo de l, dice con orgullo. Ahora, desde la Plaza Mayor de Madrid, donde est sito Arrabal, sigue buscando la excelencia que ha mamado desde sus inicios.
Su logro, como jefa de los fogones, no es ms que el producto de no rendirse, dice. Han sido cinco meses de pruebas continuas, todas las semanas. Con insistencia, perseverancia, sin dejar nunca de creer en m misma y aceptando las opiniones y crticas constructivas de todos ha conseguido, dice, que su cachopo sea nombrado el mejor de Madrid y subcampen del mundo de entre ms de 100 restaurantes de todo el mundo y 40 de la capital.
En 2023 fui al concurso pero slo qued finalista, cuenta la cocinera. Por fin puedo dormir. Es un reconocimiento personal y profesional muy grande. Lo necesitaba por m y por mi equipo, porque sin l no lo hubiese conseguido, reconoce antes de detallar el secreto de su xito en el certamen: Una alta calidad de la materia prima -ternera 100% asturiana, queso ahumado de la zona de Llanes, queso Rebolln a la sidra, y jamn serrano- y un toque de magia. El cachopo se presenta al cliente con un papel flash que, al prenderlo, descubre una cruz de Asturias. Son milisegundos, pero la gente se queda: ‘Guau’. Guios todos a una tierra donde tiene sus races.
Todo es poco para esta cocinera. El ao que viene iremos a por el mejor del mundo, dice convencida Jennifer, quien no tiene apuros en reconocer su afn de superacin mxima y de autoexigencia continua y deslizar que quiere llegar lejos. Me gustara dar un salto importante, crecer y empaparme de todo para crear mi propio proyecto, pero no tengo ninguna prisa. S mucho de cocina pero hay una parte que no conozco. Necesito ms informacin sobre contabilidad y presupuesto. Cuanto tenga eso me lanzar. Quiz a los 35, avisa.
Quiero hacer cocina de autor con algn concepto que no existe en Madrid. Tengo que darle una vuelta, apunta cuando el preguntamos por ese futuro. De momento, entre la tradicin y la vanguardia y sin dejar nunca de experimental, se mueve en la cocina de Arrabal, donde ha impreso su propio sello. Mi ambicin y mi ilusin es hacer cosas que gusten. Sin ms.
- Lleg a Arrabal en 2021 y un ao despus se puso al mando de la cocina.
- Hace cursos ‘online’ de forma continua.
- Le gustara trabajar en Diverxo.
