El Departamento de Salud de la Generalitat ha requerido a 22 mataderos de Catalunya planes de acción para la mejora de su higiene, tras detectarse niveles de salmonella y sampylobacter más altos de los que marca la normativa, según ha explicado a Europa Press el jefe del Servicio de Veterinaria de la secretaría de Salud Pública, Lluís Picart.
Los requerimientos, según ha avanzado Ara, se hacen en cumplimiento del reglamento europeo de criterios microbiológicos, que se creó en 2005 y se endureció en 2017, ante lo que la Generalitat reforzó las inspecciones de forma correspondiente.
Por ello, como procedimiento habitual y parte de una “supervisión permanente”, se requiere a las empresas que desarrollen un plan de acción cuando superan determinado número de veces (entre tres y cinco, dependiendo del producto) los niveles establecidos de salmonella y campylobacter. En esos informes, las empresas deben analizar la situación y establecer, para cada línea de producción, una solución específica a los niveles detectados de estos microorganismos.
De no presentarse el informe, o de no cumplirse o no ser efectivo, Salud puede plantear sanciones a las empresas, aunque Picart ha explicado que el sector es “el primer interesado” en hacerlo y que ya han recibido los informes de los 22 mataderos.
Además, ha subrayado que se analizan los microorganismos como indicadores de higiene, y en ningún caso de seguridad alimentaria, ya que se trata de un entorno donde aún se debe acabar de preparar el producto; no es comparable, ha dicho, a los alimentos de una línea de supermercado, por ejemplo.
Causa de brotes
La salmonelosis es una zoonosis fundamentalmente de origen alimentario. Es una de las causa más frecuente de brotes de toxiinfecciones alimentarias y de alteraciones gastroentéricas en Cataluña, en España y en muchos otros países europeos. En la mayoría de casos causa gastroenteritis y mejora sin necesidad de tratamiento, pero puede ser grave si llega a la sangre y afecta niños, personas mayores o personas con enfermedades crónicas.
Tradicionalmente, los ovoproductos y preparados a base de huevo han sido los alimentos implicados más a menudo en brotes por Salmonella y los de más riesgo sanitario, especialmente aquellos que contienen huevo crudo como la mayonesa. Han sido implicados en casos de salmonelosis alimentos con huevo crudo como salsas, helados, crema, masas de pastelería, leche no pasterizada, chocolate, y brotes de semillas de soja o alfalfa y carnes insuficientemente cocinadas, principalmente de cerdo de aves y carnes fermentadas.