LAS VEGAS, NEVADA (EE.UU.).- Durante mi breve estancia en Nueva York tuve una clara percepción concerniente a lo que piensa el ciudadano dominicano (migrante) sobre el largo proceso electoral, que podría también calificarse como “tedioso y complejo”, con miras a las elecciones presidenciales y congresuales pautadas para el próximo 19 de mayo.
En las elecciones de República Dominicana, ¿Luis Abinader ganará en la primera vuelta? O, por el contrario, ¿habrá segunda vuelta? Es lo que se comenta, con asiduidad, en la comunidad dominicana en Nueva York.
Horas después de mi llegada a Las Vegas, escenario de la pelea (por el campeonato mundial supermediano) que este sábado protagonizarán los boxeadores mexicanos Saúl -Canelo- Alvarez y Jaime Munguía, vuelvo a tratar el tema del voto del dominicano en el exterior.
Los quisqueyanos migrantes, y lo ratifico, que tienen derecho al sufragio en las elecciones presidenciales y congresuales, podrían ponerle un “toque sorpresivo” a la consulta de mayo. ¿No lo creen?
Anoto, y hay que insistir sobre este aspecto, que la Junta Central Electoral (JCE), que preside el distinguido jurista Román Jáquez Liranzo, ha organizado con sumo cuidado el proceso comicial en el exterior.
Es decir, ha montado con un efectivo criterio organizativo, todo el andamiaje que debe conllevar a que la diáspora dominicana ejerza -sin cortapisas- su derecho a elegir a las nuevas autoridades del Congreso Nacional, la Presidencia y Vicepresidencia.
Es tradicional que cuando en República Dominicana se celebran elecciones, meses antes -y hasta tres veces en un corto período- los candidatos a la Presidencia viajan para presentar sus propuestas electorales.
No solo esos viajes de los aspirantes a la jefatura del Estado se registran en Nueva York, Boston, Filadelfia y Miami (para solo citar algunas de las ciudades de EE.UU.), sino también en países europeos como España e Italia. Pero además figuran Puerto Rico, Panamá y Venezuela.
Y proclamarían los candidatos: “Hay que buscar el voto del dominicano fuera de su país donde quiera que esté”.
Es importante precisar que en Las Vegas nunca un aspirante a la Presidencia ha presentado sus ofertas electorales. En esta monumental metrópolis, bautizada como “La Ciudad del Pecado”, la propaganda electoral dominicana es nula.
Pero los dominicanos residentes en Las Vegas no están al margen de lo que ocurre en su patria a todos los niveles. Se mantienen informados a través de diarios digitales, de los canales de YouTube y las redes sociales.
Aunque los votantes de Las Vegas sean pocos, sumados a los demás sufragios del exterior, podrían hasta decidir el ganador de la consulta presidencial de mayo.
¡Cuidado!
