Santiago. El balance preliminar establece que 69 módulos resultaron totalmente destruidos y decenas afectados parcialmente con el incendio registrado en la plaza Lorenzo Vargas (El Sombrerero) y el Mercado Modelo del centro histórico de Santiago de los Caballeros.
Los propietarios de los espacios en los niveles de los centros comerciales estiman que las pérdidas superan los 150 millones de pesos.
Los mercados acogen a 250 negocios que emplean entre tres a cinco personas, desde joyerías, relojerías, salones de belleza, restaurantes, casas de cambio de dólares y cheques, tiendas y otros negocios comerciales, que se vieron afectados por el siniestro.
Alexis Moscat, jefe del cuerpo bomberos, dijo que trabajan en el levantamiento técnico para determinar la causa que originó el fuego. Sin embargo, algunos propietarios de módulos aseguran que llevaban un largo tiempo reclamando a Edenorte que corrigiera los problemas de fallas eléctricas.
El alcalde de Santiago de los Caballeros, Ulises Rodríguez, quien se presentó a la zona afectada informó que trabajan en un levantamiento para determinar la magnitud de los daños.
“Todo el equipo de la alcaldía ha dado apoyo a los bomberos para permitirle que hagan su trabajo. Ahora nos vamos a acoger al informe que está pendiente del levantamiento”, dijo Rodríguez.
Dijo que ya informó al presidente Luis Abinader para que a partir del informe se tomen las medidas que sean necesarias y brindar el apoyo que requieran los comerciantes.
El mercado modelo opera desde el año 1946, mientras que la plaza Lorenzo Vargas (El Sombrerero) fue inaugurada el 25 de octubre del 2012, en la gestión municipal de Gilberto Serulle, con una inversión de 200 millones de pesos.
En el momento en que comunicadores cubrían las incidencias del siniestro, un agente policial adscrito al patrullaje del casco del municipio de Santiago de los Caballeros ultrajó y golpeó a un reportero gráfico al que le propinó una bofetada y además manoteó a una periodista.
Roberto Jiménez, propietario de una relojería en la cual ha laborado por espacio de 34 años, dijo que el fuego dejó pérdidas por un millón de pesos.
En el caso de Fermín Muñoz, propietario de dos módulos en el segundo nivel de la plaza ubicada entre las calles Del Sol, la 16 de Agosto y la España explica que las pérdidas superan los cinco millones.
Los empleados que llegaron hasta la zona afectada, desconocían qué harían ahora, pues la mayoría de módulos quedaron totalmente destruidos y otros afectados de manera parcial y no podrán abrir por el momento.
Emilio Castillo, dueño de un módulo, dijo que espera conocer la magnitud de los daños y aguarda el apoyo de las autoridades.
Falta hidrantes dificultó labor de los bomberos
La falta de hidrantes en el casco urbano de la ciudad dificultó que los bomberos pudieran contar con agua cercana para apagar las llamas. Desde hace un tiempo una gran parte de los hidrantes o no funcionan o fueron eliminados del centro de la ciudad, debido a que algunos ciudadanos abusaban del consumo excesivo al conectarse. Para apagar el incendio fue necesario que acudieran bomberos desde otros municipios.