El presidente argentino, Javier Milei, calificó como «un disparate propio de un socialista arrogante» la retirada definitiva de la embajadora de España en Argentina, María Jesús Alonso, tras una escalada en el intercambio de insultos entre él y Pedro Sánchez.
«Los socialistas son capaces de hacer cualquier cosa», dijo el presidente. Y añadió que Argentina no tomaría una medida similar en respuesta a esto.
La crisis, iniciada por el ministro de Transporte, Óscar Puente, quien sugirió el 3 de mayo que Milei consumía «sustancias», se agravó el último fin de semana cuando el argentino afirmó, en un evento de Vox, en Madrid, que la esposa de Sánchez, Begoña Gómez, era «corrupta».
Milei afirmó este martes que Sánchez «se sintió aludido, por lo cual es su problema; era una frase que no contenía nombres. A partir de ahí, se produce una escalada diplomática sin sentido».
Milei añadió que Sánchez cree ser «el Estado español» y que los pueblos argentino y español son libres y pueden relacionarse perfectamente bien a pesar de las diferencias o problemas entre sus líderes. También afirmó que la postura de Sánchez se debe al escenario electoral actual en Europa.
«Esto ensucia la imagen internacional de España y lo arrogantes que son al creerse el Estado y pensar que nadie puede decirles nada». Al mediodía, la canciller Diana Mondino debe ofrecer más aclaraciones sobre la crisis diplomática.
Los principales medios argentinos destacaron como tema principal del día el anuncio del gobierno español, después del recrudecimiento de los insultos por parte de la gestión de Javier Milei a lo largo del último lunes.
En una entrevista con el periodista Jonathan Viale en el programa político nocturno «La Ves?», el mandatario argentino reiteró que no pediría disculpas a Sánchez por haber llamado corrupta a su esposa: «No le voy a pedir disculpas [a Sánchez] bajo ningún punto de vista. Yo fui el agredido», afirmó, recordando que funcionarios del gobierno español lo han calificado de «xenófobo, racista, ultraderechista, negacionista y misógino».
Milei señaló que la controversia fue iniciada por el ministro español Óscar Puente, y mencionó otros ataques recibidos por parte de integrantes del gabinete de Sánchez.
Horas antes, el portavoz Manuel Adorni, al comentar sobre la convocatoria de la embajadora para consultas, había declarado que Argentina no consideraba la crisis actual como una cuestión diplomática: «De ninguna manera está en riesgo la relación entre España y Argentina». Para el gobierno, dijo Adorni, el viaje había sido un éxito en el sentido de que la reunión con los empresários había sido «fabulosa»
Fuentes de la Casa Rosada confirman que el presidente no cambiará de posición y considera que la cuestión diplomática sigue un curso separado y completamente aparte de la relación entre los mandatarios. El subsecretario de prensa de Milei se pronunciaba sobre esto la red social X.
Lo que está haciendo Sánchez es un papelón histórico. No tiene precedente. Las relaciones entre los países están determinadas por los individuos, por la historia y por las culturas. Ningún autócrata de turno puede cambiarlo…
— Javier Lanari (@javierlanari) May 21, 2024
En la conferencia de prensa de ayer, Adorni afirmó que el gobierno había recibido una «cascada de insultos» por parte del gobierno de Sánchez, y que la referencia de Milei a Gómez era muy marginal y menor en comparación con la gravedad de los insultos. «Se sintieron ofendidos y lo que ocurra a partir de ahora corre por su cuenta (de los españoles)».
Desde la Casa Rosada confirman que esta crisis diplomática no cambia por el momento los planes del presidente argentino de volver a España en menos de un mes, coincidiendo con su viaje para asistir a la cumbre del G-7 en Italia a mediados de junio.