Sorprendi la repentina baja de Morante de la Puebla el pasado domingo en Navalmoral, pero la lucha y el sufrimiento vienen de largo.Un ao o as. Por eso la temporada de 2023 fue tan difcil y complicada, entre idas y venidas, no slo por la lesin de la mano: la enfermedad psiquitrica de la que est diagnosticado y tratado el maestro de La Puebla ha rebrotado inesperadamente.
Sorprende tambin, por cierto, que en tiempos en los que se ha normalizado hablar de la salud mental en todos los mbitos del deporte y la cultura todava en el mundo del toro -en especial en las estpidas redes sociales- haya quienes se escandalicen por la pieza publicada por este medio, escrita desde el rigor y el respeto, sobre el preocupante estado de Morante. El parte facultivo oficial y cierto de Navalmoral, pues una cosa no quita la otra, sino que agrava las sensaciones, la sintomatologa, la tristeza, hablaba de una infeccin respiratoria, mialgias, fiebre y malestar general.
Morante se ha fijado la fecha del Domingo de Resurreccin de Sevilla para volver a los ruedos, descartando otros compromisos, como el de este sbado en Almedralejo, donde toreaba con Emilio de Justo y Juan Ortega. Es la base del abono de la Maestranza y no quiere fallar en modo alguno a la espera de que «prenda la alegra», de que funcione el tratamiento. Los especialistas, no sin cautelas, son optimistas, dicen desde su entorno.
