La consejera de Educación, Esther Niubó, ha salido este sábado a dar explicaciones de la inédita suspensión del proceso de adjudicación de plazas de este mes de julio. Después de que las listas se publicaran el miércoles, se detectaron irregularidades que obligaron a descolgarlas y anular todo el proceso, que se volverá a repetir. Niubó ha confirmado, según ya apuntaba ayer Ustec, que el incidente había sido “deliberado” y ha anunciado un expediente informativo y que “se depurarán responsabilidades”. La consejera dará explicaciones el martes en el Parlament.
El Departamento de Educación reunió ayer de urgencia a direcciones y sindicatos para explicar lo sucedido y fue entonces cuando los sindicatos revelaron la magnitud de lo sucedido: en las adjudicaciones de verano, en las que participan unos 57.000 docentes, se detectó que unas 878 plazas que tenían que haberse otorgado a funcionarios habían sido ocupadas por interinos. Las quejas de varios profesores cuestionando las adjudicaciones hizo saltar las alertas en el Departamento, que tras comprobar que la incidencia era importante, decidió anular las adjudicaciones y reinicia el proceso. “Se trata de hechos graves que ponen en cuestión la fiabilidad del Departamento y la transparencia del proceso”, ha aseverado la consejera.
Este sábado, Niubó no ha escondido de que todo indica a la acción deliberada de una persona. “No ha sido ni un error informático ni humano. Tenemos indicios de la intervención de una persona, tomando una decisión unilaterial, contraviniendo la normativa del departamento”, ha asegurado en entrevistas a Catalunya Ràdio y Rac1. La consejera ha admitido que ya tienen un sospechoso, pero que hay un expediente informativo abierto que deben resolver. Con todo, ha avanzado que “las consecuencias deben ser contundentes” y que “se depurarán responsabilidades”.
A pesar de que en el proceso participaban 57.000 docentes, el Departamento asegura que hay afectado unos 3.000 “que en la mayoría de caso será para mejorar la opción”, ha apuntado Niubó. La consejera ha asegurado que este fin de semana trabajan en las nuevas adjudicaciones para tenerlas listas la próxima semana. Con todo, descarta retrasar el inicio del curso, tal y como reclaman los sindicatos. “No podemos permitir que esta incidencia cause mayor perjuicio a familias y alumnos, Estos profesores se iban a incorporar el 1 de septiembre, y continuará siendo así”.
La consejera ha pedido comparecer de urgencia el martes en el Parlament para dar explicaciones de lo sucedido.