Es indiscutible: Shonda Rhimes es una de las reinas de la industria audiovisual y est por todas partes. La productora y guionista estadounidense es la artfice de Los Bridgerton, cuya tercera temporada se estren este jueves. Rhimes lo vuelve a hacer: eleva a Penelope Featherington, el personaje que interpreta Nicola Coughlan (Galway, 1987), de lucecita a supernova. Y, claro, ahora todas quieren ser Penelope. Todas quieren su determinacin, su autoestima (reconstruida) y, por supuesto, su suerte.
Shonda Rhimes no sabe crear mujeres sin carcter, le son inconcebibles. Su apuesta por figurones femeninos es incesante, y la pequea de las Featherington es la ltima incorporacin a una larga lista de imponentes mujeres. Esta vez, la estrella de la temporada se postula como una de las favoritas del pblico (y eso que cada vez Rhimes lo tiene ms difcil para superarse) porque lo de Pen ha sido metamrfico: de carcter marginal tipo Nick Carraway a personalidad de ncar. A quin no le gusta algo as? Bien por Penelope, bien por Shonda.
La factora de produccin Shondaland plasma a la propia Rhimes tal y como ella es: osada y algo pcara con todas sus propuestas -erotismo acentuado, polmicas irrefrenables, emocin exacerbada-, pero tambin realista, porque la panoplia de sus personajes nunca est completa: todas tienen defectos, y todas viven con ellos.
Desde el entorno de la imperfecta y divertida Meredith Grey, al Washington conquistado por la influyente y glamurosa Olivia Pope, pasando por la nueva definicin de astucia que consuma la compleja y artera Annalise Keating (e includo el enigmtico paradigma que encarna Anna Delvey): los mujerones de Rhimes conforman una especie de horizonte, son las mujeres a las que su audiencia quiere parecerse. Porque todas ellas tienen lo suyo, pero todas ellas enganchan. En realidad, Shonda Rhimes nos gusta porque es capaz de hacer realidad el universo en el que se encuadran todos estos personajes. Uno que, a decir verdad, se parece mucho al que habitamos, aunque no sea del todo idntico.
Shonda Rhimes es de Chicago, hija de profesores y una lectora voraz. Comenz a escribir pronto y de todo (sentimentalismos, sobre todo). Como Penelope, quiso dedicarse a escribir, pero descart la va de los anaqueles y escogi ser la mano que escribe el texto que inspira la imagen: guionista. Estudi cine en la Universidad de California del Sur y, de hecho, se estren en aquella disciplina. Firm los guiones de Dorothy Dandridge y Princesa por Sorpresa 2. La primera potenci la carrera de la actriz Halle Berry -hasta el punto en que fue la primera mujer negra en ser nominada a un Oscar por mejor actriz- y la segunda reanud la historia de la princesa que todas las nias aspiraban – y todava aspiran- a ser. Luego, pas a la televisin y las series que produjo para ABC colmaron su casa de galardones como un Golden Globe, un Writers Guild Award o Productor Televisivo del Ao, entre muchos otros.
Tras los pelotazos de Anatoma de Grey y Scandal, Rhimes apost por el modelo de negocio de la ene roja y, en fin, se estima que atesore cerca de 240 millones de dlares. Para presumir de pluma, escribi un libr, El ao del s; ah, y tambin ha salido tres aos (2007, 2013 y 2021) en la lista de personas ms influyentes que publica la revista Time.
Desde la perspectiva del curriculum vitae, no es de extraar que esta institucin de la televisin sea feminista -y no del tipo fucsias, magentas y Barbie-, que alente a las mujeres fuertes y currantes, sufridoras y sufridas; pero tambin a las romnticas que se rinden al amor (todava eso se puede hacer). Apuesta por caonazos que se alejan del estereotipo Sydney Sweeney y que parecen resucitar aquella campaa ‘real’ de Dove. Mujeres como todas, vaya.
