La historia de amor entre Lara Álvarez y Perico Durán fue breve, pero significativa. Su relación, que se reanudó a finales de 2024 tras años de distanciamiento, sorprendió a propios y extraños. «Estoy muy ilusionada», decía Lara en diciembre, mostrándose muy feliz con esta nueva oportunidad.
Sin embargo, la felicidad duró poco, pues en mayo de 2025 la historia llegó a su fin. Lara Álvarez fue la primera en confirmarlo, explicando con sinceridad que «a veces con quererse no basta y con el mismo respeto y amor con el que hemos mantenido la relación, así lo hemos dejado».
Durante un tiempo, ninguno de los dos hizo más declaraciones. Ella se volcó en su nuevo proyecto televisivo, mientras lidiaba con el desgaste emocional que le supuso afrontar la ruptura en plena promoción profesional. Como la propia presentadora admitió semanas después, «ha sido un mes durísimo», refiriéndose al equilibrio entre lo personal y lo laboral.
Perico Durán habla por primera vez de su ruptura con Lara Álvarez

Recientemente, ha sido Perico Durán quien decidió compartir su versión, en una entrevista en la cadena COPE. El piloto sorprendió por la profundidad de sus reflexiones y por la forma en que abordó lo ocurrido. Defendió la idea de que «habría que normalizar que el amor consciente no es fácil», y añadió que, cuando uno ha construido una vida plena y elige desde la madurez emocional, hay que aceptar que las relaciones también pueden terminar sin que ello implique un fracaso.
«Creo que muchas veces también cuando te das cuenta de que no puedes aportar ni recibir de la otra persona lo que esperas, un acto de amor también enorme es dejar ir», aseguró. Con estas palabras, Durán dejó claro que la ruptura se produjo en los mejores términos, destacando que fue «en paz, muy bien dejado, con todo el deseo positivo». No hubo reproches ni heridas: «Nunca ha habido una mentira, una palabra más alta que otra ni un daño el uno al otro».
«Nos hemos respetado al cien por cien, hemos sido leales, nos hemos querido y apoyado en lo bueno y en lo malo», añadió. Aunque confesó que la relación no llegó «hacia donde habíamos soñado», no lo considera una pérdida: «Es un triunfo del amor consciente, del amor sano, y estoy muy orgulloso de cómo lo hemos hecho». También se deshizo en elogios hacia Lara Álvarez: «Es una persona importantísima para mí, a la que admiro muchísimo y a la que siempre le desearé lo mejor».
Lara Álvarez, por su parte, no tardó en reaccionar. En un evento reciente, afirmó con rotundidad que suscribe «todas sus palabras», reforzando la idea de que la relación, aunque acabó, dejó un rastro de cariño y admiración mutua. Sobre una posible reconciliación, la asturiana respondió entre risas: «Haría negocio, me metería a pitonisa… no tengo ni idea, la verdad», mostrando que, aunque el vínculo afectivo perdura, por ahora ambos siguen sus caminos por separado.