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Una nueva encuesta ha sacado a relucir un tema del que se habla poco: ¿el dinero da la felicidad en lo que a relaciones sexuales se refiere? ¿Acaso están más satisfechos sexualmente hablando los ‘ricos’ que los ‘pobres’? Pues parece que sí.
En los últimos años, numerosos psicólogos y sociólogos se han puesto a investigar si existe relación entre el nivel de ingresos y el placer sexual. Y aunque los resultados no son definitivos ni se puede generalizar, sí que hay un patrón que se repite: más estabilidad económica suele ir de la mano con mayor satisfacción sexual.
Los que ganan más dinero tienen mejores relaciones sexuales
Al menos eso es lo que asegura una encuesta reciente realizada por We-Vibe entre 1.000 españoles. El objetivo era explorar cómo varía la satisfacción sexual según el nivel de ingresos. Y los resultados fueron reveladores, ya que indicaron que los individuos de hogares con mayores ingresos declararon estar más satisfechos con su vida sexual en comparación con los que pertenecían a estratos de ingresos más bajos.
Lo vemos más claro por ingresos mensuales de ambos miembros de la pareja:
- Los que cobran menos de 1.000€ al mes: el 45% de los encuestados se declaró insatisfecho con su vida sexual, y únicamente un 37% dijo estar satisfecho.
- Ingresos mensuales entre 1.501 y 2.500€: aquí ya se percibe el cambio. El 56% aseguró estar satisfecho, aunque todavía un 44% declaró que no lo estaba.
- Los que juntan un sueldo de más de 2.500 € mensuales: el nivel de satisfacción sube al 65%, con solo un 35% insatisfecho.
- Más de 4.000 €: entre los que cobran más de esta cantidad mensual, el 75% confesó estar satisfecho sexualmente. Solo un 25% dijo no estarlo.
Lo que dice la ciencia
Como vemos, cuanto más alto es el ingreso familiar, más probabilidades hay de sentirse satisfecho con la vida sexual. La ciencia también lo ha demostrado. En 2022, un estudio publicado en la revista Liminales analizó el vínculo entre ingresos y comportamiento afectivo-sexual en más de 1.200 personas en México. Los investigadores concluyeron que quienes tenían mayores ingresos presentaban menos deseo de ser infieles a sus parejas y más satisfacción general, lo que sugiere relaciones más estables y una intimidad en horizontal más placentera.
Otro estudio, esta vez global y llevado a cabo por Ipsos, reveló que las personas con más ingresos no solo están más satisfechas con sus relaciones sexuales, sino que también se sienten más amadas. En concreto, el 89% de los encuestados con altos ingresos afirmó sentirse emocionalmente valorado.
Y tener más relaciones sexuales lleva a ganar más dinero
Por si fuera poco, parece ser la pescadilla que se muerde la cola, ya que, tal y como confirmó esta investigación llevada a cabo por el doctor Nick Drydakis, máster en Economía, de la Universidad Anglia Ruskin en Cambridge, las personas que mantienen relaciones sexuales dos o tres veces a la semana ganan un 4,5% más que aquellos que intiman con menos frecuencia.
«Podemos concluir que la actividad sexual se asocia con la buena salud y la mejora de las capacidades físicas y mentales, el bienestar psicológico y los hábitos alimenticios», aseguró Drydakis.
¿El dinero te hace ser mejor amante?
Pues no parece, y tampoco es cierto que el dinero dé la felicidad, pero ayuda a lograr ambas cosas. Es decir, ganar más puede ayudar a construir un mejor entorno para el bienestar íntimo, así como puede aumentar las ganas de tener sexo, al vivir con menos agobios y preocupaciones.
Al respecto, es evidente que el dinero reduce tensiones ligadas a la incertidumbre financiera, lo cual permite relajarse y conectar mejor con la pareja. Además, los que más ganan suelen dedicar menos energía a su trabajo, ya que, normalmente, tienen más flexibilidad horaria y empleos más cómodos. A todo ello hay que sumarle que, de forma general, los que ganan más suelen tener una mejor educación sexual y emocional, lo que les puede motivar a intentar conectar más con su pareja y a cuidar más esta parte de la relación. Así, podríamos concluir que aunque el dinero no asegura placer directamente, sí ayuda a disfrutarlo más y mejor.
