Rodrygo Goes sigue siendo jugador del Real Madrid, aunque da la sensación que no es así. No hay enfado en el club ni en Ancelotti por todo lo que está sucediendo en torno a él desde la final de la Copa del Rey, pero también … es cierto que el jugador quizás no está gestionando la situación lo mejor posible. Ayer, a los diez minutos de iniciarse el entrenamiento previo al partido contra el Mallorca, y con los medios de comunicación aún presentes, se marchó al vestuario acompañado de Daniel Rosado, uno de los doctores del Real Madrid. El brasileño, durante uno de los primeros ejercicios de la sesión, sintió una molestia en la parte posterior superior de su pierna izquierda, se acercó a Ancelotti para comunicárselo, y se retiró de la sesión. Si una buena parte del madridismo empieza a estar disgustado con el delantero, lo de ayer no ayuda a calmar los ánimos.
«Rodrygo tuvo un estado febril la semana pasada que no le ha permitido volver a su mejor nivel. Hoy ha tenido una molestia muscular, aunque no sé de qué pierna, y hay que examinarle. El jugador no está a su mejor nivel y está decepcionado porque quiere mostrar su calidad, pero no hay nada más a pesar de la especulación que se ha montado. A Rodrygo le tenemos mucho cariño. Sobre todo, yo», dijo Ancelotti en su defensa durante su comparecencia en Valdebebas.
La situación de Rodrygo es, en estos momentos, complicada. Durante la semana de la final de Copa ya le transmitió a Ancelotti que quizás no era el mejor momento para contar con él. El año 2025 está siendo duro para el brasileño y ahora mismo mentalmente no se ve capacitado para ponerse la camiseta del Madrid y jugar. Lo hizo en La Cartuja porque se lo pidió Ancelotti como un favor, cegado el italiano con jugar con los cuatro de arriba, pero duró 45 minutos y se llevó duras críticas por una primera parte en la que ni siquiera era capaz de correr.
Rodrygo ha colapsado tras una temporada en la que se las prometía muy felices compartiendo ataque con Mbappé, Vinicius y Bellingham. Se siente incomprendido y poco valorado, y eso ha influido en su rendimiento y en su estado de ánimo. Cree que la exigencia y la vara de medir que hay con Rodrygo no existe con sus compañeros de ataque y que la crítica, interna y externa, no es imparcial cuando se juzga a los ‘cuatro fantásticos’.
¿Eso quiere decir que Rodrygo se va a marchar del Madrid? Él tiene la decisión en su mano. Si quiere ser vendido, solo tiene que subir al despacho de Florentino y comunicarlo. El Madrid, no piensa ponerlo en el escaparate, pero si Goes se quiere ir, el precio de venta nunca bajará de los 100 millones de euros. Tiene contrato hasta 2028 y una cláusula de mil ‘kilos’. El club blanco solo se sentaría a negociar por ofertas de tres cifras.
Así que, como ya detalló ABC, Rodrygo tendrá una charla con Xabi Alonso y según lo que hablen, se producirán los acontecimientos. Sobre la mesa tiene tres ofertones de Liverpool, Arsenal y United. Y el City, al que dijo que no el pasado verano, también observa de cerca los movimientos del brasileño. El Mundial de Clubes está ya ahí, a la vuelta de la esquina. Veremos si Rodrygo lo juega, o no. Y si lo hace, lo disputa con la camiseta del Real Madrid, o no.
