El hospital Reina Sofía de Córdoba atiende cada año a 4.000 pacientes de toda la provincia con enfermedad de Alzheimer, además de detectar 300 casos nuevos cada año. En Andalucía, unas 120.000 personas están aquejadas de esta enfermedad, que se eleva a 800.000 en el caso de toda España.
Actualmente la esperanza está puesta en un tratamiento farmacológico que se está evaluando en la Agencia Europea del Medicamento y cuyos riesgos sobre su seguridad se ponderan en estos momentos. Todos estos datos han surgido del acto informativo que ha tenido lugar en el hospital cordobés con motivo de la celebración del Día Mundial del Alzheimer el próximo día 21 de septiembre. Especialistas de Neurología del Hospital coinciden en la detección cada vez más temprana de personas con Alzheimer, un dato muy significativo dada la progresiva pérdida de autonomía que puede provocar. Es la forma más común de demencia.
«Tenemos la esperanza de que en los próximos cuatro o cinco años quizá haya tratamientos que puedan empezar a administrarse siempre a grupos muy concretos de personas y en una fase de la enfermedad también muy concreta», ha afirmado el neurólogo del Reina Sofía, Fernando Acebrón, con respecto a ese fármaco estudiado en Europa. «Hay por tanto una moderada esperanza, no podemos decir que vamos a curarlo pero sí a encontrar grupos de pacientes que dentro de cinco o diez años puedan beneficiarse de estas terapias».
La enfermedad de Alzheimer tiene más prevalencia a partir de los 65-70 años, aunque en Andalucía surgen cada año entre 150 y 200 casos de Alzheimer presenil, o sea, antes de los 65 años, y que supone entre el 20 y el 30% de los casos. Es la causa más común de demencia, y acarrea la pérdida de funciones para la persona afectada.
Rsidencia San Rafael
«El motivo se encuentra en un depósito anómalo de proteínas que interfieren en la comunicación entre neuronas, lo que lleva a la alteración de distintas funciones cerebrales, siendo la más típica la memoria, aunque puede haber otras implicadas, como el lenguaje o las funciones ejecutivas o visoespaciales», ha especificado otro neurólogo del hospital, José Javier Bravo.
El Alzheimer, desde su detección hasta el fatal desenlace, ofrece una perspectiva de unos diez a doce años de vida. Para que los fallos de memoria se consideren preocupantes al principio de la enfermedad han de repercutir en su vida diaria, es decir, «cuando ya me equivoco al hacer la compra, o cuando me dan una vuelta, cuando no sé manejar el dinero en el banco o me pierdo en el barrio en el que llevo viviendo 40 ó 50 años», ha recalcado el director gerente del hospital, Francisco Triviño.
La Asociación San Rafael de Alzheimer ha instalado una mesa informativa en el Reina Sofía. Su presidente, Francisco Manuel Blasco, ha adelantado que la residencia de la entidad, ante la demanda, aumentará en breve las plazas de su residencia en cuatro más. Al acto informativo en el Reina Sofía también ha acudido la delegada de Salud de la Junta, María Jesús Botella.