A pesar de que las previsiones apuntaban a que este sábado sería un día muy lluvioso, el tiempo dio una tregua y ha acompañado a las más de 400 personas que participaron este sábado en la X Fiesta por la Mujer y la Vida, a beneficio de Proyecto Mater, a beneficio de Proyecto Mater, y del Jubileo de las Familias, que llevaba por lema: ‘Peregrinos de Esperanza’, que todos los asistentes han llevado en sus mochilas blancas.
La marcha ha comenzado pasadas las 16.30 horas desde el Paseo de Merchán, en la zona del templete, hasta la plaza de Zocodover, donde se leyó el Manifiesto por la Vida y las Familias, mientras muchos de los participantes han aplaudido y han gritado al unísono: «Sí a la vida». En el manifiesto se ha vuelto a defender el derecho a la vida, a la mujer, «queremos decir que la vida empieza aquí, en el seno de la mujer. Queremos decir que la vida es sagrada».
Las familias, niños, personas mayores y jóvenes han mostrado su alegría durante el recorrido de esta marcha «sin banderas políticas», en la que han querido defender «la vida desde la concepción hasta la muerte natural». «Cada uno de nosotros somos seres débiles, frágiles y vulnerables. Esto se pone de manifiesto, principalmente, tanto al inicio como al final de nuestra existencia. El cuidado del ser vulnerable, recién nacido, enfermo, discapacitado ha sido y es uno de los rasgos esenciales de la condición humana. La respuesta a esta fragilidad se traduce acompañar a toda persona en cualquier situación de vulnerabilidad», ha recogido el documento.
Marcha festiva
Al llegar a la céntrica plaza de Zocodover, los participantes de la marcha, en medio de fuertes medidas de seguridad por parte de la Policía local, se han encontrado con cerca de medio centenar de personas, pertenecientes a la Plataforma del 8M y de Mujeres de Negro, que les han gritado lemas: ‘Aborto es un derecho, no un debate’, ‘Si o no decido yo’, ‘ Iglesia y estado asunto separado’ ‘Fuera los rosarios de nuestros ovarios’. Los asistentes han respondido con aplausos a esta provocación, sin que se produjera ningún incidente.
Una de las participantes, conocida en Toledo como Quica (de 76 años), no ha podido disimular su disgusto porque -ha dicho- no entender la manifestación por la vida. «No vengo por mí porque ya no puedo abortar. Vengo por la gente joven que no quiera tener hijos y se tiene que respetar: el Estado, la iglesia y los ciudadanos», ha manifestado para repetir que es un derecho que ya se tiene en España y se lamentó que ahora gracias al apoyo del ayuntamiento se produzcan este tipo de manifestaciones. «Nos debemos respetar unos a otros. Punto», ha matizado.
Unos pasos más adelante se encontraba Margarita, que cogida de la mano de sus nietas, ha querido responder a los manifestantes que defendían el derecho al aborto. Se ha mostrado muy feliz por la marcha por la vida. «Es una manifestación preciosa porque en la vida, es donde vemos el amor de Dios», ha indicado para señalar que ella ha acudido a esta convocatoria con todos sus hijos y nietos.



Cientos de personas han asistido este sábado a la manifestación por la Mujer y la Vida a favor de proyector Mater. Abajo, a la izquierda las mujeres de la Plataforma 8M a favor del aborto. A la derecha, asistentes a la marcha a favor de la vida
Margarita, enfermera de profesión, ha reprochado que los manifestantes del 8M encontraran una oportunidad para enfrentarse con la marcha Provida. «En el fondo sabemos que Jesucristo nos quiere a todos. También a ellos, solo que no le conocen. Entonces no pueden defender la vida. Para ellos es otro cosa», ha señalado mientras encaminaba sus pasos hacia la plaza del Ayuntamiento.
Tras concluir la lectura del Manifiesto, los asistentes han continuado hacia la catedral para participar de la procesión hasta la catedral, donde se ha celebrado también el Jubileo de las Familias, con la eucaristía presidida por el arzobispo Francisco Cerro. Concluida la ceremonia, muchas de las familias y participantes han disfrutado de la fiesta en el claustro de la catedral, con bar, tómbola y mercadillo solidario, actividades infantiles preparadas por Acción Católica General.
Las opiniones de los asistentes
Entre los asistentes, predominaban familias con menores, personas mayores y jóvenes, muchos de los cuales son voluntarios de Cáritas. Precisamente, los jóvenes han querido expresar su opinión sobre esta marcha. Ana (23 años) y que está preparándose una oposición, ha defendido acudir a esta marcha porque «quiero mostrar mi apoyo a las mujeres, a las embarazadasy a ese niño que va a nacer».
Ella, se ha mostrado contraria a la píldora del día después porque «es una forma de matar a ese niño y cada mujer no es Dios para decidir si debe nacer o no». Además, ha defendido el derecho a la vida y a que los niños lleguen a este mundo. «Si Dios quiere que tengan TDH, autismo o discapacidad, pues bienvenido es», ha reiterado.
Por su parte, Sergio de 21 años, ha indicado que participa porque él entiende que es una forma de decirles a las mujeres que no están solas y que pueden contar con el apoyo de Cáritas. «Hay entidades que les arropan y que pueden luchar por la vida». Y ha compartido la opinión de Ana, y recomienda que antes de usar la pastilla del día después vean que hay muchos recursos «para que puedan seguir adelante con el embarazo», ha remarcado.
También Justi, que ha llegado a la capital regional desde Bargas, ha manifestado que acude a la marcha para dar su testimonio y decir que está a favor de la vida. Ha criticado los métodos que utilizan muchos jóvenes para abortar, como es la píldora del día después. Cree que se está dando de «una forma irresponsable y esos jóvenes que la utilizan no tienen tanta madurez».
Justi ha explicado que actualmente predomina el egoísmo y hay una falsa libertad entre muchas personas, para remarcar que ella «es respetuosa con las opiniones de todas las personas y aboga por fomentar más educación en estos aspectos.