Desde las seis de la mañana de este miércoles la Policía Nacional está desplegando un fuerte dispositivo en las Tres Mil Viviendas después de los distintos tiroteos registrados en el barrio en los últimos días desencadenado por el primer episodio de la madrugada el pasado domingo entre clanes de drogas tras un vuelco de sustancias estupefacientes, eran Caracoleños y Naranjeros. Se usaron armas de guerra, lo que llamó poderosamente la atención de los vecinos, acostumbrados a escuchar tiros pero no de esa dimensión. Los vídeos del momento se hicieron virales.
Dentro de las Tres Mil Viviendas hay dos dos núcleos de pisos considerados los puntos negros por su alta conflictividad y por el mercado de la droga, son las barriadas Murillo y Martínez Montañés, conocida como Las Vegas. La presencia policial ha alertado a los vecinos de esta zona, que han salido de sus casas como curiosos y también algunos ha aprovechado para increpar a los efectivos nacionales por realizar su función.
Según ha informado ‘in situ’ una portavoz de la Policía Nacional, el dispositivo de este miércoles es el «culmen» de otras investigaciones previas. Han precisado que el operativo de hoy es «habitual» en las zonas más conflictivos de las Tres Mil, sobre todo las barriadas de Murillo y Martínez Montañés, conocida como Las Vegas, y en otros barrios de la ciudad.
Hay más de 300 miembros del Cuerpo Nacional de Policía desplegados en esta zona del Sur de la ciudad, sobre todo en los conocidos como los pisos ‘marrones’, los ‘verdes’ y Las Vegas.
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Se han realizado, hasta el momento pues la operación sigue abierta, 16 registros domiciliarios, donde se han intervenidos armas, aunque se han visto escopetas y rifles, y sustancias estupefacientes, sin especificar, aunque las grandes bolsas sacadas de estos pisos desprendía un fuerte olor a marihuana. Como se ha indicado antes, la actuación policial continúa en lugar pero de momento ya se han detenido a más de una decena de personas miembros de organizaciones criminales.
«Restablecer la seguridad»
La portavoz policial, ante la alarma social generado por los últimos episodios ocurridos en las Tres Mil, ha explicado que la Policía Nacional «está a pie de calle» para restablecer la seguridad en el barrio. «Estamos trabajando para ello, hay agentes uniformados y de paisano». No es la primera que los agentes intervienen armas estos días, pues el domingo de madrugada también se hicieron con las armas usadas en el tiroteo y casquillos. Un dispositivo seguirá de forma permanente en la zona. No se descartan más detenciones ni nuevas vías de investigación.
La Policía, desde primera hora, ha cortado todas las vías de acceso al Polígono Sur, en un dispositivo formado por agentes a caballo, que están rastreando las distintas calles, así como unidades caninas y de la Unidad de Intervención Policial (UIP), con sus famosas ‘lecheras’. Hasta cincuenta vehículos. También había helicópteros sobrevolando la barriada.
La actuación policial se están centrando exclusivamente en la barriada de Murillo, en los bloques verdes y marrones, donde se produjo el tiroteo de la madrugada del domingo y zona de influencia y control de los Caracoleños, conocidos con este sobrenombre porque es una familia procedente de las viejas caracolas de Los Bermejales. En concreto, los agentes están desplegados en el entorno de los pisos ‘amarillos’ y los ‘marrones’, donde el olor a marihuana es detectable por cualquier testigo. Precisamente, en la calle Viento del Pueblo, en los pisos ‘marrones’, se están produciendo registros y detenciones, de donde los agentes están sacando bolsas, supuestamente de marihuana, del bloque del primer detenido.
Ayer, el delegado del Gobierno en Andalucía, Pedro Fernández, aseguró que estos días se reforzaría la presencia de Policía Nacional en la zona para buscar armamento ilegal y a sus dueños.
