Los orzuelos, esos pequeños y dolorosos bultos que aparecen en el borde del párpado, son una molestia ocular frecuente que muchos han experimentado en algún momento de sus vidas. Aunque no suelen ser graves, su aparición puede causar incomodidad y afectar a nuestra rutina diaria. En ese sentido, recientemente la farmacéutica ‘farmatiks’ ha revelado a través de TikTok las verdaderas causas de los orzuelos y cómo mantener una limpieza adecuada de nuestros ojos para prevenir su aparición.
En el video, la creadora de contenido planteó una situación común: «Ponte en esta situación, llega el verano, estás en tu peak absoluto y de repente tu mejor mirada de seducción se convierte en este orzuelazo. ¿Por qué sucede esto y por qué es tan común en verano?». A partir de esta premisa, la farmacéutica detalló que «debajo de nuestros párpados están las glándulas de meibomio, que desembocan en la raíz de nuestras pestañas y cuya función es producir grasa para lubricar la superficie de nuestro ojo y evitar que la lágrima se evapore demasiado rápido».
La farmacéutica explicó que «distintas condiciones pueden ocasionar que se dificulte el flujo de esta grasa, produciéndose una obstrucción en la glándula. Si además esta grasa acumulada se sobreinfecta con bacterias, tenemos un orzuelo». Según señaló, en verano estamos más expuestos a irritantes como la sal y el cloro, lo que favorece el rascado, empujando las bacterias al interior de las glándulas. «Además, la grasa se oxida más fácilmente y, por lo tanto, se vuelve más espesa, favoreciendo la obstrucción», agregó.
Cómo limpiarnos los ojos para evitar los orzuelos
Para evitar que los orzuelos y los párpados irritados se conviertan en una molestia recurrente, la farmacéutica reveló los pasos que debemos seguir para mantener una correcta higiene ocular. El proceso comienza con la aplicación de una compresa con agua templada, sin frotar, para ablandar la suciedad. «Si te lo quieres ahorrar, un buen momento para la limpieza es después de la ducha», sugirió. Sin embargo, si el orzuelo ya «está como una castaña», recomendó el uso de «agua fría».
El siguiente paso consiste en masajear suavemente las glándulas de meibomio para facilitar la salida de las secreciones: «En sentido ascendente en el párpado inferior y en sentido descendente en el párpado superior, sin apretar demasiado». Una vez preparado el ojo, el último paso es utilizar toallitas estériles de limpieza para retirar el exceso de secreción y desobstruir las glándulas. «Al realizar esta limpieza, también mejorará mucho la hidratación de nuestro ojo, ya que la secreción de grasa va a poder realizar su función protectora», concluyó la farmacéutica.