La sugerencia de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para aceptar refugiados haitianos en la República Dominicana hasta que pase la crisis social implicaría una posible «fusión y mudanza» de Haití hasta el territorio nacional, según los candidatos congresuales del partido Fuerza Nacional Progresista (FNP).
Este viernes, el candidato a senador por el Distrito Nacional, Vinicio Castillo, enfatizó que el recibimiento de haitianos en el país «significaría una fusión de los dos países» ya que, según alegó, los extranjeros se aprovecharían de la oportunidad para entrar en masa hasta República Dominicana buscando protección ante la crisis social y política que enfrentan en su país.
«La ONU quiere mudar Haití para República Dominicana tomando como excusa la crisis que ellos mismos han dejado que se desencadene, para usarla ahora como pretexto y traer haitianos aquí», aseveró el político.
Asimismo, dijo que la posición del presidente Luis Abinader para impedir la entrada de haitianos ha sido «firme y valiente» por el momento «crucial e histórico» que vive el país ante la crisis haitiana.
Campo para refugiados
También, el candidato a senador y exdiputado sostuvo que el país se mantendrá alerta ante los supuestos intentos de la ONU para instalar en el país un centro que acoja a los refugiados haitianos, que huyen de su país atemorizados por el estallido de violencia que se vive allí.
En ese orden, expresó que, si el centro de refugiados se materializa en el país, significaría que República Dominicana recibiría alrededor de dos millones de haitianos, un hecho que consideró como «peligroso» tomando en cuenta que miembros de bandas armadas en Haití podrían pasar al territorio dominicano.
«Lo que queremos es paz y respeto a nuestra soberanía. No queremos intentos de injerencias ni presiones para ceder a los pedimentos de la ONU. Vamos a defender este país sin importar el precio ni las consecuencias», destacó Castillo.
Bandas en Haití
La situación de inestabilidad en Haití se agudizó cuando un grupo de bandas armadas entró a cárceles del país y liberó a presos de los peligrosos grupos que ahora azotan con violencia en todo el territorio.
Tras los hechos, la ONU pidió a la República Dominicana que detenga las deportaciones y que sirva como puente para colaborar con la estabilización de Haití.
