La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, deberá someterse a una moción de censura ante el Parlamento Europeo, probablemente en la próxima sesión plenaria de julio. Esto ha sido solicitado formalmente por un grupo de más de 72 eurodiputados, que reclaman su salida del Ejecutivo comunitario por ocultar sus mensajes de texto con el CEO de Pfizer durante la pandemia de coronavirus.
Para forzar una moción de censura –que, de salir adelante, supondría hacer caer al Ejecutivo al completo–, es necesario que lo pida una décima parte de los diputados que forman la Eurocámara, como ha ocurrido en este caso con la iniciativa promovida por el eurodiputado rumano Gheorghe Piperea, del grupo ultraderechista Conservadores y Reformistas Europeos (ECR, por sus siglas en inglés).
Sin embargo, para ser aprobada es necesario que la moción cuente con el apoyo de una mayoría de dos tercios de los votos emitidos que, a su vez, represente la mayoría de los diputados que componen el Parlamento. Fuentes parlamentarias consultadas por Europa Press deslizan que la iniciativa sobre la mesa no tiene visos de prosperar porque ningún grupo en la Eurocámara, tampoco los más críticos con la conservadora alemana, apoyan en bloque la moción.
En julio de 2024, la conservadora alemana logró el visto bueno de la Eurocámara para asumir un segundo mandato, aunque lo logró con una ajustada mayoría de 401 votos a favor (de los 707 emitidos), 284 votos en contra, 15 abstenciones y siete votos nulos.
En todo caso, la demanda ha sido formalmente registrada y cuenta con los avales necesarios, por lo que una vez validada por los servicios de la institución, la presidenta de la Cámara, Roberta Metsola, procederá a informar a todos los eurodiputados y se fijará el debate y posterior votación, que será nominal y no podrá celebrarse antes de que transcurran 48 horas desde el debate.
Fuentes parlamentarios confirman a Europa Press que la petición ya ha sido registrada y que una vez que se compruebe que cumple con requisitos establecidos por el reglamento, se procederá a cumplir los siguientes pasos del proceso para celebrar el debate en la próxima sesión plenaria, prevista del 7 al 10 de julio en Estrasburgo (Francia). Aunque hay varios precedentes de mociones presentadas contra el Ejecutivo comunitario, ninguna de ellas prosperó.
La moción de censura se apoya en la sentencia del pasado mayo del Tribunal General de la UE que anuló la decisión de la Comisión Europea de denegar el acceso a una periodista al contenido de los mensajes de texto que en la época de negociación de los contratos de compra de vacunas contra el coronavirus intercambiaron Von der Leyen, y el CEO de Pfizer, Albert Bourla.