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El cisma político entre el Partido Popular y Vox ha quedado consumado. Tras días de amenazas si el PP aceptaba pactar con el Gobierno central el reparto voluntario a las comunidades autónomas de los menores inmigrantes no acompañados hacinados en Canarias, Santiago Abascal, el líder de Vox, oficializó -a última hora del jueves- su ultimátum: ruptura de sus gobiernos autonómicos de coalición con el PP.
En Castilla-La Mancha el papel de la formación que lidera Abascal es irrelevante debido a la mayoría absoluta de la que disfruta el partido socialista liderado por Emiliano García-Page. Es más, esta semana, PP y PSOE han llegado a un acuerdo sobre la tramitación del nuevo Estatuto de la región donde Vox lamentó «el secretismo y la opacidad» con la que ambos partidos habían llevado a cabo la reforma.
Una situación, cuanto menos convulsa, ante la cual la dirección parlamentaria de Vox en las Cortes de Castilla-La Mancha emitió este viernes un comunicado en el que su portavoz, Iván Sánchez, mostró su apoyo a la postura anunciada por Abascal, señalando que «nadie nos ha votado para que continúe la invasión de inmigración ilegal y de menas». «Estamos en completa sintonía con la dirección nacional», remarcó.
En esta línea, Sánchez denunció que «no se puede combatir el sanchismo con quien pacta con Sánchez» y reafirmó el compromiso de su partido con los principios y la palabra dada a sus votantes. «En Vox no tenemos ningún apego a los sillones sino a los principios. Entre los sillones y nuestras palabras, elegimos cumplir nuestra palabra. Es imposible pactar con el que no quiere hacerlo y estamos convencidos de que nadie ha votado a Vox para que seamos aliados de quien tiene como socio preferente al PSOE de Pedro Sánchez».
Así, quiso enumerar los «acuerdos negociados» entre el PSOE y el PP, destacando la renovación del Consejo General del Poder Judicial, la presidencia del Banco de España, la Junta Electoral Central, el Tribunal de Cuentas, el Tribunal Constitucional, la regularización de 500.000 inmigrantes ilegales, el reparto de menas y otros temas de relevancia como la reforma del Estatuto de Autonomía de Castilla-La Mancha o la «paguita» a cargos políticos cesados.
Una noticia que suscitó un sin fin de reacciones políticas, sobre todo, desde las filas socialistas. Diferentes cargos salieron en tromba a emplazar a los ‘populares’ que rompieran todos los pactos por los que mantienen varios gobiernos en ciudades importantes de la región, así como en dos diputaciones provinciales. Una de las voces que lo hizo fue el secretario de Organización del PSOE de Castilla-La Mancha, Sergio Gutiérrez, quien se preguntó qué sentido tiene «que no gobiernen en las regiones por la inmigración y sí traguen en lo local con el desprecio a las mujeres, la violencia de género, la comunidad LGTBI o la censura a la cultura».
Más peticiones de ruptura
El mismo mensaje lanzó el secretario general del PSOE de la provincia de Toledo, Álvaro Gutiérrez, que exigió al Partido Popular «romper de forma necesaria, inmediata y urgente sus pactos con el partido de ultraderecha hoy mismo, sin llegar al lunes»
«El PP no puede mantener sus gobiernos con un partido de la radicalidad de ideas de Vox, con su desprecio a las mujeres, a las políticas de igualdad de género, a la violencia de género, a la libertad sexual, con su censura a la cultura», en definitiva, «con su política de ultraderecha y prácticamente rayando el fascismo», aseguró Gutiérrez.
El secretario general de los socialistas toledanos afirmó que no tiene ningún sentido que, habiendo dimitido los vicepresidentes de Vox en las comunidades presididas por el PP, «en la Diputación de Toledo siga siendo el vicepresidente de Vox o que el presidente de Vox en Castilla-La Mancha, David Moreno, siga siendo vicealcalde de la ciudad de Talavera».
Además, que el motivo de la ruptura haya sido el reparto de menores inmigrantes supone que «hoy, con una claridad mayor que nunca, el PP debe romper definitivamente sus gobiernos con Vox».
«La sociedad, los ayuntamientos y las diputaciones no pueden soportar ni un minuto más que el PP mantenga en sus gobiernos a aquellos para quienes unos niños migrantes son el problema», criticó Gutiérrez, quien apeló al PP a «demostrar su responsabilidad y romper definitivamente sus gobiernos con el partido ultraderechista de Vox».
«El PP no romperá con nadie»
Desde el PP, su portavoz castellano-manchega, Alejandra Hernández, salió este viernes al paso de estas declaraciones asegurando que el PP no tiene «que romper con nadie» al tiempo que afirmó que es un partido «serio y de gobierno» que va a seguir trabajando para cumplir su palabra y los compromisos adquiridos en los últimos comicios municipales.
«En su día acordamos una alternativa en los ayuntamientos y lo estamos haciendo», indicó.
Para Hernández, la gestión que están haciendo los alcaldes del PP en los ayuntamientos que gobiernan en la región es «muy satisfactoria». «Estamos orgullosos de todos y cada uno de nuestros alcaldes y respaldamos su éxito».
También se refirió en concreto al secretario de Organización de los socialistas castellanomanchegos, Sergio Gutiérrez, para emplazarle que le pida al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que rompa los pactos que tiene «con los filoetarras».
«Nosotros no tenemos que romper con nadie y nuestro objetivo es seguir trabajado por los ciudadanos de Castilla-La Mancha. Somos un partido serio y de gobierno que gestiona y trabaja por los intereses y por solucionar los problemas a los vecinos de nuestros municipios», reiteró la portavoz.