El Grupo Parlamentario Vox ha registrado en el Congreso una proposición no de ley «sobre el incremento de la inmigración durante los meses de verano» que incluye una batería de medidas. Entre ellas, destaca una que pide «garantizar la transparencia, tanto en los medios de comunicación como en la información de las administraciones públicas, de los datos sobre la autoría y nacionalidad de los crímenes cometidos por inmigrantes ilegales».
Los de Santiago Abascal quieren acabar con ese imperativo mediático que conduce a la mayoría de medios a evitar señalar la nacionalidad del criminal, cuando esta es extranjera. RTVE, sin embargo, sí que tiene un acuerdo por escrito, pactado por PP y PSOE en 2003, para ocultar el origen de un perfil de delincuentes en España. El documento prescribe que hay que evitar incluir el grupo étnico, el color de la piel, el país de origen, la religión o la cultura cuando ocurriesen sucesos trágicos.
Esto conduce a que medios como THE OBJECTIVE tengan que recurrir al portal de Transparencia para obtener este tipo de datos, que sí que obran en manos de las administraciones, tales como que el 60% de los menores de 22 años presos en cárceles españolas son extranjeros o que estos ya cometen la mayor parte de los delitos relacionados con la okupación (el 52%). El resto pueden desprenderse del Instituto Nacional de Estadística o de documentos recónditos del Gobierno.
RTVE lo admitió
El diputado de Vox Manuel Mariscal preguntó el pasado mes de junio por esta cuestión a Concepción Cascajosa, presidenta de RTVE, en el Congreso de los Diputados, instándole a explicar «si existe una directriz interna en Radiotelevisión Española que establezca la orden de ocultar la nacionalidad de las personas responsables de hechos delictivos cometidos en España».
Carcajosa admitió que el libro de estilo del ente público dicta que «la nacionalidad de cualquier persona solo se concretará cuando esta sea relevante para la comprensión de la información». También confesó tener la «precaución de no destacar datos que podrían provocar juicios de valor injustos o peligrosos», tales como «etnia, color de piel, religión, país de procedencia u orientación sexual».
Vox y la inmigración
Tal y como desveló este medio, el partido que preside Santiago Abascal lo apuesta todo a la inmigración. Los conservadores están convencidos de que en los próximos años crecerán conforme el problema de seguridad relacionado con la inmigración descontrolada se vaya agudizando en España. Ese es el motivo por el que han roto los gobiernos autonómicos con el Partido Popular, amén de que buscaban ya una ruptura para evitar que otras opciones políticas los ubicaran dentro del establishment.
Francia es el espejo en el que se miran. «Hay que mirarse en el espejo de Francia o los países nórdicos, donde se ha comprobado el fracaso de las políticas migratorias; hacia ahí nos dirigimos», afirman fuentes de Bambú, que abundan: «el drama es que hasta que no nos encontremos en cada barrio, en cada esquina, con el problema no espabilaremos».