El Congreso ha acordado este jueves una iniciativa del grupo parlamentario socialista para reforzar la regulación de la inteligencia artificial, de tal manera que se asegure la protección de las personas más vulnerables.
La proposición no de ley ha salido adelante con 180 votos a favor, 32 en contra y 135 abstenciones, y propone una actuación enmarcada en tres ejes fundamentales: «La regulación, la información y formación preventiva, la concienciación colectiva y prevención pública, y el uso adecuado en el acceso de los menores».
El texto acordado insta al Gobierno a desarrollar esta regulación de acuerdo con la normativa europea, respetando las competencias autonómicas, y considerando los objetivos éticos y democráticos del bien común y el interés general, así como garantizando la inclusión y el bienestar social.
La portavoz socialista de Inteligencia Artificial, Luisa Sanz, ha defendido que hay que «seguir avanzando en el desarrollo de los mecanismos de la Agencia Española de Supervisión de la Inteligencia Artificial, como autoridad para garantizar los derechos democráticos, dotándola de los recursos necesarios y de mecanismos para que pueda velar por el bienestar social a través de un marco ético».
Sanz ha señalado que «el reglamento europeo -cuyo último borrador se publicó el pasado 13 de marzo-, además de ser pionero en el mundo, ofrece un marco que es un buen punto de partida, pero no es suficiente», de ahí la necesidad de fortalecer la regulación a nivel nacional.
