Endesa detectó el año pasado 44 manipulaciones al día, de media, en total 16.096 casos de fraude eléctrico en la red eléctrica de Cataluña, con 356 GWh defraudados, casi el equivalente al consumo anual de una ciudad como Manresa. De éstos, un 4,4% (713 expedientes) estuvieron vinculados a plantaciones de marihuana, pero la energía robada era tal, 172 GWh, que supuso un 48,3% del total defraudado en Cataluña, el equivalente al consumo de una población como Mollet del Vallès, con más de 51.000 habitantes, en un año. El 57,7% de los expedientes se abrieron en la provincia de Barcelona. La eléctrica participó en cerca de 2.400 operaciones de las fuerzas de seguridad para desmantelar cultivos indoor. Cada día los técnicos de la compañía desconectaron de la red una media de dos plantaciones de marihuana en Cataluña, siete a nivel nacional, donde la valoración económica de las pérdidas supera los 2.000 millones de euros al año.
Cada plantación consume, de media, como 80 viviendas, por lo que el impacto de estas instalaciones fraudulentas en las pérdidas del sistema eléctrico y en el deterioro de la calidad del suministro en zonas con un porcentaje de fraude elevado es una realidad. Por provincias, Endesa abrió el año pasado en Barcelona 12.297 expedientes con 259.251.684 kWh de energía defraudada casi la mitad, 116.243.151 kWh, por 412 plantaciones de marihuana. En Tarragona se abrieron 1.768 expedientes de los cuales 113 relacionados con marihuana y del total defraudado, 48.010.279 kWh, la mitad 24.560.179 kWh fueron por plantaciones. En Girona, hubo menos expedientes en general que en Tarragona, 1.749 con un total defraudado de 35.926.920 kWh, sin embargo más estaban vinculados a plantaciones, 145, que representan 23.388.321 kWh defraudados, casi un 66% del total. Lleida es la demarcación con menos fraude. El año pasado se abrieron 282 expedientes por el robo de 13.330.142 kWh, 43 de ellos estuvieron relacionados con las drogas y representaron un hurto de 8.318.075 kWh.
“El epicentro del fraude relacionado con la marihuana es la AP-7, desde el Montsià al sur, al Alt Empordà como puerta a Europa. La mayoría se concentran en los Valleses, donde hay muchas naves en polígonos industriales y en la Selva, donde abundan las urbanizaciones. Alguna sorpresa también ha dado algún pueblecito de la Anoia”, detallan fuentes de la eléctrica.
Endesa se ha sumado al uso de la Inteligencia Artificial (IA). Las nuevas tecnologías se han convertido en herramientas esenciales para combatir un fraude, cada vez más profesionalizado y con una alta tasa de reincidencia, en un contexto de percepción de escaso riesgo económico. En el caso de las plantaciones de marihuana, cada vez más complejo y sofisticado. Por eso, al menos en Cataluña, el esfuerzo y los recursos se han centrado y se han orientado en estos casos, para recuperar el máximo de energía defraudada. Los técnicos de la eléctrica han hallado manipulaciones de cables entre paredes, subterráneos o incluso en recámaras debajo de piscinas.
A nivel nacional. la compañía estima que las plantaciones de marihuana consumen cerca de 2,2 TWh de electricidad. En algunas zonas acaparan hasta el 80% del consumo eléctrico y los sistemas de iluminación y ventilación utilizados para acelerar el crecimiento de las plantas funcionan mediante conexiones ilegales que causan graves daños en la red eléctrica. Las plantaciones indoor, las instalaciones para cultivar marihuana en el interior de edificios, concentran el 37% de la energía recuperada en los fraudes detectados por Endesa, casi diez puntos más que en 2022. Además, Los expedientes por enganches ilegales a la red eléctrica vinculados a plantaciones de cannabis en las zonas donde opera han aumentado cerca de un 70% en el último lustro y la energía recuperada en estos expedientes se ha incrementado un 83% en el mismo período.
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