La profesin de piloto ha sido tradicionalmente ejercida por gente de clase social elevada, dicho en trminos informales, por pijos. Alguien al que llamar Paco, antiguo miembro de Ultras Sur, me habla de los aos en que estudi para ser piloto. Yo estudiaba en La Fundacin. Estaba en la calle Lagasca, muy cerca de la tienda de Caribbean. Sera el ao 90. Ah estaba el Carlos [nombre falso], que iba con uno al que llamaban Pepito. Acabaron estudiando en ESIC. Haba un grupillo de pijos malotes que eran de la Moraleja e iban mucho a Pach. Recuerdo una trifulca. Yo estaba con un grupo de ultras del Real Madrid en el Kioto, un garito al lado de Pach y tuvimos una bronca con unos pijos. Salimos para fuera y uno de los pijos trajo al Carlos y a sus amigos. Fue una pelea con cierto cdigo de honor porque dijeron: ‘Uno contra uno!’ Y los hijos de puta de los pijos estos metieron una paliza a los ultras… Los pusieron de colores. Solo hubo un ultra que cane a uno de los pijos.
Paco tuvo relacin con los nazis de Jumbo, unos skinheads que paraban en el parque del antiguo Jumbo, frente al metro de Po XII: Conozco a estos porque empiezo a moverme por la grada del Bernabu. Muchos eran hijos de militares, que estudiaban en el CHA [el Colegio de Hurfanos de la Armada] cerca del Pinar de Chamartn. Vivan en unas casas de militares en esa zona. Muchos de ellos derivaban en el fondo sur.
Uno de los skins de Jumbo le puso el ojo a la virul a un pijo malo que estudiaba conmigo en Aeromadrid, una escuela de vuelo. Un da el pijo ste estaba en un bar de la Castellana, una terracita de moda. A la altura del Bernabu. Los skins haban tomado tripis y uno fue a pedirle un cigarro a los pijos, entre los que estaba el piloto este… El piloto les habl mal y uno de mis amigos directamente le solt un truco que le puso el ojo de vuelta y media. Pero los pijos hicieron frente. Mis colegas salieron por patas, pero los pijos los pillaron. Y los pusieron finos. Eran pijos que saban pegar. Deban ser afines a la famosa Panda del Moco. El pijo este casi dej la escuela porque tena un desprendimiento de retina. Tambin le daban a la coca. Recuerdo que el pijo llegaba a las prcticas de vuelo y me deca: ‘Joder, vengo totalmente enzarpado. Ni me he acostado!’. Cogan la avioneta y se ponan a volar con el instructor. Uno me cont que hizo un cucurucho con la carta de navegacin para poder vomitar. La carta de navegacin era un mapa que llevbamos para volar. Vomit por la resaca que tena. Vomit en el cucurucho mientras pilotaba el avin!.
Paco lleg a sacarse el ttulo de piloto privado. Por supuesto, los exmenes tericos los aprob copiando. Pero yo pilotaba bien. Empiezas a pilotar una avioneta antes que un coche. Con 12 horas de vuelo te coge el monitor, se baja de la avioneta y te dice: ‘Ahora me vas a hacer tres aterrizajes y tres despegues’. Y luego te dicen: ‘Hoy vas a hacer una excursin t solo. Ve por una zona que conozcas, no te vayas muy lejos y vuelves a aterrizar’. Eso lo llamaban vuelo instrumental. Llevas un mapa, te haces unos recorridos muy cortos que cronometras.
Contina: «Las avionetas llevaban los depsitos en las alas. Y cada media hora tienes que cambiar de depsito porque si gastas uno y el otro no, eso se empieza a descompensar. En un momento dado, me salto uno de los puntos sealados en el recorrido y me pierdo. Pero me pierdo de que estoy ah arriba y digo: ‘Qu coo hago?’. Y era por la tarde. El aeropuerto de Cuatro Vientos cerraba a las siete y media o algo as. Si el aeropuerto cierra, no puedes aterrizar ah. A todo esto, se me olvida cambiar el depsito. Y empiezo a notar que la avioneta se va de madre. Total, que ya me contacta mi instructor desde la radio: ‘Dnde ests hijo de puta?’ Le digo: ‘No tengo ni puta idea’. ‘Qu me ests diciendo?! Que me buscas la ruina, hijoputa! Clmate, busca el silo de Navalcarnero'».
Sigue su relato: «El silo es donde se almacena el trigo. Son edificios blancos y enormes. Llaman la atencin. El silo estaba cerca de la pista de aterrizaje. Finalmente lo encuentro y acab aterrizando de lado. Con un depsito vaco, el otro lleno hasta los topes. Pego tres botes. Aterric de milagro. Uno de mi promocin se mat tras estrellarse con unos cables de alta tensin en la carretera de Extremadura.
Finalmente, tuvo que abandonar la idea de ser piloto: Tena un examen y el da anterior en una pelea me meten una patada. Me voy a casa tranquilamente. Pero al da siguiente no me poda ni mover. Me haban roto la apfisis de una vrtebra. Y me tuve que pasar quince das en el hospital. Me tuve que saltar el examen y no pude examinarme con el grupo. Por tanto, no pude copiar. Cuando me toc examinarme solo, el examinador ve que lleg con un papel y un boli. Y me dice: ‘No traes calculadora para calcular vectores?’ Saqu un cero. Entonces se destapa la liebre. ‘Pero, chico, si t aprobaste el privado’. Ya se enteran en mi casa, y acab dejando lo de piloto.
Es autor de Macarras interseculares, editado por Melusina, [puedes comprar el libro aqu], Macarrismo, editado por Akal, [puedes comprar el libro aqu], Macarras ibricos, editado por Akal, [puedes comprar el libro aqu], la La verdadera historia de la Panda del Moco. [puedes comprar el libro aqu] y San Vicente Ferrer 34 [puedes comprar el libro aqu].